Artículo: Las reuniones de Saint-Denis: una iniciativa política que pierde impulso
Desde su primera edición el pasado mes de agosto, los encuentros de Saint-Denis organizados por Emmanuel Macron han despertado mucha expectación y curiosidad. La idea de reunir a los líderes de los partidos políticos en torno a una mesa para superar las divisiones y trabajar juntos en interés del país parecía prometedora. Sin embargo, la segunda edición de estos encuentros, que tuvo lugar el pasado viernes, estuvo marcada por la ausencia de varias figuras de la oposición, lo que pone en duda el interés y la relevancia de estos encuentros.
Durante este segundo encuentro, Emmanuel Macron quiso abordar diversos temas como la evolución del alcance del referéndum, la descentralización o la situación en Oriente Medio. Sin embargo, figuras políticas como Manuel Bompard de La France insoumise, Éric Ciotti de los Republicanos y Olivier Faure del Partido Socialista rechazaron la invitación del Presidente de la República. Esta notable ausencia pone en duda el valor político de estos encuentros y su capacidad para reunir verdaderamente a los diferentes actores políticos del país.
Emmanuel Macron expresó su desaprobación por esta ausencia y calificó la decisión de los líderes de LR y PS de “gran error político”. Subrayó también que estos líderes políticos han tenido la oportunidad de gobernar Francia durante décadas y, por tanto, deberían explicar a sus votantes por qué no están presentes en estas reuniones. Si algunos líderes de la oposición decidieron participar, esta ausencia de pesos pesados políticos pone en duda el objetivo inicial de las reuniones de Saint-Denis, que era superar las divisiones y encontrar soluciones comunes.
El interés por estas reuniones también estuvo relacionado con la cuestión del referéndum sobre inmigración. Si los republicanos y la extrema derecha querían poder consultar a los franceses sobre este tema, la ausencia de Éric Ciotti, líder del partido LR sobre este tema, es aún más sorprendente. Esta situación pone de relieve las diferencias dentro de los propios partidos políticos y pone en duda la capacidad de estas reuniones para conducir a compromisos concretos.
Al final, las reuniones de Saint-Denis parecieron perder su atractivo y legitimidad política. Si algunos líderes políticos respondieron, la ausencia de figuras de la oposición y las posiciones divergentes sobre temas clave ponen en duda la eficacia de estas reuniones para encontrar soluciones comunes. Por tanto, es necesario revisar la forma y el contenido de estas reuniones para hacerlas más relevantes y atractivas para todos los actores políticos.