Durante su visita real en noviembre pasado, el rey Carlos III y la reina Camilla se alojaron en una villa ecológica en el condado costero de Kilifi, en Kenia. Esta magnífica villa de cinco dormitorios, cada uno con su propio baño, ofrece impresionantes vistas del Océano Índico.
Lo que agradó especialmente al rey Carlos, preocupado por el medio ambiente, fue el uso de energía solar para alimentar toda la villa, así como su piscina infinita. Construida en 2016 por el diseñador holandés Erwine Overkamp, radicado en Kenia, y anteriormente propiedad del renombrado empresario keniano Chris Kirubi, esta casa familiar ultramoderna de estilo escandinavo está ubicada en una parcela verde y exuberante de 750 metros cuadrados. Su ubicación privilegiada en la prestigiosa Vipingo Ridge, a sólo media hora en coche de la ciudad portuaria de Mombasa, lo convierte en un destino popular.
Rodeada de majestuosos árboles, con un balcón que ofrece impresionantes vistas del horizonte, la villa fue sin duda elegida por la familia real por su seguridad, privacidad y estrecha conexión con la naturaleza, dice Overkamp.
El rey Carlos y la reina Camilla solo estuvieron en esta villa 24 horas, pero según el diseñador, disfrutaron muchísimo de su visita. «Tuve el privilegio de conocer al Rey y a la Reina, y Su Majestad enfatizó que amaba la arquitectura y la combinación de lo moderno y lo antiguo», dice Overkamp. «La Reina también mencionó que tuvo una estadía fantástica. Aunque solo tuvieron menos de 24 horas, realmente disfrutaron su estadía».
El rey Carlos III y la reina Camila realizaron una visita oficial de cuatro días a Kenia a principios de noviembre. Esta visita permitió estrechar los lazos entre los dos países y poner de relieve iniciativas ecológicas como esta villa solar, que representa un verdadero paso adelante en términos de desarrollo sostenible.