Len’s Omelonga, activista de derechos humanos y ejecutivo del partido político Envol de Delly Sesanga, fue liberado de la prisión central de Makala el sábado 2 de diciembre. Fue condenado el pasado mes de octubre a siete meses de prisión por insultos al Jefe de Estado y acusaciones perjudiciales. Los cargos que se le imputan se derivan de haber difundido un tuit de crítica al poder vigente, procedente de una persona radicada en Sudáfrica. Los tribunales lo juzgaron en virtud del artículo 360 del nuevo código digital.
Len’s Omelonga fue detenido el 1 de mayo en Kinshasa y pasó casi dos meses bajo custodia de la Agencia Nacional de Inteligencia (ANR) antes de ser trasladado a la fiscalía y puesto en prisión preventiva en la prisión de Makala.
Este comunicado plantea muchas preguntas sobre la libertad de expresión y la represión de las voces disidentes en la República Democrática del Congo. Los defensores de los derechos humanos denuncian periódicamente detenciones arbitrarias y cargos falsos para amordazar a la oposición política y a los activistas.
El caso de Len Omelonga pone de relieve los desafíos que enfrentan los activistas de derechos humanos en el país, que enfrentan una represión cada vez mayor. También plantea interrogantes sobre los límites de la libertad de expresión en Internet y el papel de las redes sociales como vehículo de protesta política.
A medida que la situación política en la República Democrática del Congo continúa evolucionando, es esencial permanecer alerta y apoyar las voces que se levantan para defender los derechos humanos y la democracia. La publicación de Omelonga de Len representa una pequeña victoria, pero la lucha por la justicia y la libertad está lejos de terminar.