Al menos 160 personas murieron en ataques de grupos armados entre el sábado por la noche y el lunes en varias aldeas del estado de Plateau, en el centro de Nigeria, anunciaron el lunes las autoridades locales.
«Las hostilidades que estallaron el sábado continúan el lunes por la mañana», declaró el lunes a la AFP Kassah, presidente del consejo de gobierno de Bokkos, una circunscripción situada en esta región plagada de tensiones religiosas y étnicas desde hace varios años.
«Se han encontrado al menos 113 cadáveres», añadió, mientras que el balance comunicado por el ejército el domingo por la noche ascendía a 16 muertos.
Y «más de 300 personas» resultaron heridas y fueron trasladadas a hospitales en Bokkos, Jos y Barkin Ladi, afirmó el lunes Kassah.
Grupos armados, llamados localmente «bandidos», atacaron «no menos de 20 pueblos» entre el sábado por la tarde y el lunes por la mañana, añadió, subrayando que «los ataques estuvieron bien coordinados».
Además de las 113 muertes en el distrito electoral de Bokkos, «al menos 50 personas fueron asesinadas» en cuatro pueblos del distrito vecino de Barkin Ladi, según el miembro de la asamblea local Dickson Chollom.
«No cederemos ante los métodos de estos mercaderes de la muerte; estamos unidos en nuestro deseo de paz y justicia», afirmó a la AFP.
El gobernador del estado de Plateau, Caleb Mutfwang, calificó el domingo la acción armada de “bárbara, brutal e injustificada”.
«El gobierno tomará medidas proactivas para detener los continuos ataques contra ciudadanos inocentes», dijo Gyang Bere, portavoz del gobernador.
Según una fuente local, se volvieron a escuchar disparos el domingo por la tarde.
La ONG Amnistía Internacional reaccionó a la violencia en su cuenta Twitter, estimando que «las autoridades nigerianas han fracasado sistemáticamente en sus intentos de poner fin a estos frecuentes ataques en el estado de Plateau».
Las poblaciones del noroeste y centro de Nigeria viven aterrorizadas por los ataques de grupos yihadistas y bandas criminales que saquean aldeas y matan o secuestran a sus habitantes.