Los profesores de las escuelas secundarias públicas de la República Democrática del Congo se enfrentan a una situación crítica. Trabajando bajo el estatus de unidades nuevas (N.U) y no remuneradas (N.P), solicitan la intervención del presidente Félix-Antoine Tshisekedi Tshilombo para la regularización de su situación. Esta cuestión debería ser una prioridad durante su segundo mandato, especialmente porque está previsto ampliar la educación gratuita al nivel secundario general.
Estos docentes, que prefirieron testificar de forma anónima, expresan su frustración por lo que consideran una injusticia y un sabotaje. A pesar de las promesas que les hicieron, su primer mandato bajo la presidencia de Félix Tshisekedi estuvo marcado por sacrificios sin recompensa. Algunos de ellos incluso trabajaron durante años sin recibir salario.
Cuando se introdujo la educación gratuita y se creó una comisión para identificar nuevas unidades con derecho a recibir pago, creyeron que su situación finalmente se resolvería. En febrero de 2020, había 144.944 nuevas unidades elegibles para recibir pago. El gobierno se ha esforzado por regularizar gradualmente la situación salarial, empezando por el pago de 58.000 profesores de primaria en octubre de 2020. Sin embargo, la mayoría de los profesores de secundaria no remunerados siguen esperando.
A pesar de los obstáculos causados por la pandemia de Covid-19, el gobierno ha seguido implementando medidas para resolver esta situación. Los números de registro fueron otorgados a docentes de secundaria en enero de 2022, confirmando su mecanización. Sin embargo, durante la nómina de abril de 2022, muchos de ellos no recibieron sus salarios. Creen que su situación debería haberse resuelto durante el primer mandato del presidente Tshisekedi, sobre todo porque se hicieron esfuerzos considerables y algunos docentes recibieron salarios superiores a la cifra oficial de 144.944.
Ante esta situación insostenible, estos docentes piden al Presidente que escuche su grito de alarma y tome medidas para resolver su problema. También piden una verificación cruzada de los agentes ya pagados para garantizar la transparencia del proceso.
Es importante enfatizar que este tema de la mecanización de las nuevas unidades docentes debe ser examinado de cerca. Es necesario encontrar una solución para poner fin a este sufrimiento que dura demasiado tiempo. Los docentes siguen decididos a obtener justicia y planean organizarse como colectivo para hacer oír su voz, respetando al mismo tiempo las leyes del país.
Es esencial que el Presidente Tshisekedi tenga en cuenta esta situación crítica y actúe rápidamente para regularizar la situación de los profesores de secundaria.. Estos docentes, que desempeñan un papel crucial en la formación de las generaciones futuras, merecen recibir remuneración y apoyo en su noble misión. Es hora de poner fin a esta injusticia y darles a los docentes el reconocimiento que merecen.