Liberia da la bienvenida a su nuevo presidente, Joseph Boakai, con una emotiva ceremonia de toma de posesión. A la edad de 79 años, Boakai se convierte en el presidente de mayor edad en la historia del país y ha prometido unir y sacar a la república más antigua de África de sus problemas económicos.
La ceremonia tuvo lugar en Monrovia, capital de Liberia, en presencia de ciudadanos y delegaciones extranjeras. Vestido con el traje tradicional liberiano, Boakai pronunció un discurso en el que destacó la importancia de la unidad y la energía política en la construcción de una nación. También enumeró sus prioridades, que incluyen fortalecer el Estado de derecho, luchar contra la corrupción y renovar la esperanza de los ciudadanos.
Sin embargo, la ceremonia fue abruptamente interrumpida cuando Boakai mostró signos de angustia física durante su discurso. Rápidamente lo sacaron del podio mientras intentaba en vano continuar con su discurso. Un portavoz del partido político de Boakai dijo que su debilidad se debía al calor y no tenía nada que ver con su salud.
A pesar de las dudas sobre su edad, Boakai desestimó las preocupaciones, argumentando que su experiencia y sus logros beneficiarían al país. Ganó unas elecciones reñidas contra George Weah, el presidente más joven en la historia de Liberia.
La imagen pública de Weah, un legendario ex jugador de fútbol convertido en político, se había empañado cuando terminó su primer mandato de seis años. Los críticos lo acusaron de no cumplir sus promesas de campaña de arreglar la debilitada economía de Liberia, erradicar la corrupción y garantizar justicia para las víctimas de las sucesivas guerras civiles del país entre 1989 y 2003.
Esta transición de poder ofrece así un rayo de esperanza para Liberia, con un nuevo presidente que quiere ser unificador y decidido a afrontar los desafíos que enfrenta el país. Ahora queda por ver si Boakai puede convertir sus palabras en acciones concretas y lograr los cambios económicos y sociales que los liberianos anhelan.