Cuatro años después de su lanzamiento, el Proyecto de Apoyo al Desarrollo Integrado de la Economía Rural (PROADR) sigue avanzando en la provincia de Kwilu, en la República Democrática del Congo. Financiado por el Banco Africano de Desarrollo, este proyecto tiene como objetivo promover el desarrollo económico de las zonas rurales fomentando el emprendimiento agrícola y rural eficiente. Actualmente, las actividades agrícolas están en su apogeo en la región, con la cosecha de maíz en los sitios de Ndunguluso y Katambulungu.
El coordinador del gobierno nacional de PROADR, Joseph Mwamba Lubemba, es el encargado de supervisar las cosechas en estos sitios. En Ndunguluso se están cosechando 410 hectáreas de maíz, con una producción prevista de 1.200 toneladas. Además, el equipo de PROADER también está presente en el sitio de Katambulungu, donde se encuentra en pleno desarrollo la cosecha de maíz.
Sin embargo, Joseph Mwamba Lubemba no sólo supervisa la cosecha, sino que también se compromete a resolver los problemas de infraestructura. En las provincias de Kwilu y Maï-Ndombe, puso en marcha trabajos manuales de acantonamiento, con miras a garantizar la transitabilidad de los caminos rurales. Esta iniciativa tiene como objetivo facilitar la evacuación de productos agrícolas desde las zonas de producción hacia los centros de comercialización, aliviando a los productores de las dificultades logísticas que enfrentan.
Estos esfuerzos demuestran el compromiso del gobierno congoleño y de PROADR con el desarrollo agrícola y rural sostenible. Al mejorar la infraestructura y apoyar a los productores locales, el proyecto contribuye a la promoción de una economía rural próspera en la provincia de Kwilu.
Es importante enfatizar que PROADR cubre varias provincias de la República Democrática del Congo, demostrando así su impacto a escala nacional. Además de Kwilu, también se benefician de este importante proyecto las provincias de Kongo-Central, Kwango, Kasaï, Kasaï Oriental y Maï-Ndombe.
En conclusión, el proyecto PROADR constituye una respuesta concreta a los desafíos socioeconómicos que enfrentan las comunidades rurales en la República Democrática del Congo. A través de iniciativas como la promoción del emprendimiento agrícola y la provisión de infraestructura de calidad, el proyecto ayuda a crear un futuro mejor para los agricultores y las poblaciones rurales en la región de Kwilu y más allá.