Las condiciones necesarias para el inicio de las obras de construcción del nuevo aeropuerto internacional de Ndjili en Kinshasa, capital de la República Democrática del Congo (RDC), están a punto de cumplirse. Según el ministro congoleño de Transportes y Comunicaciones, Marc Ekila, el 95% de los preparativos ya están hechos. Las obras, con una duración estimada de dos años, serán confiadas a la empresa turca Milvest, que ha obtenido una financiación de más de 1.200 millones de dólares.
Durante una reunión con responsables de la Régie des Voies Aériens (RVA) y el representante de la empresa Milvest, el ministro presentó el modelo de las futuras instalaciones. También se organizó una visita al sitio para evaluar las condiciones de construcción.
Cabe recordar que las obras de rehabilitación del aeropuerto fueron realizadas inicialmente por la empresa china Weihi Technical Cooperative (WIETC), pero fueron suspendidas por falta de financiación. Hoy es la empresa Milvest la que se encargará de realizar este importante proyecto, que debería contribuir al desarrollo del transporte aéreo en la República Democrática del Congo.
Se espera con impaciencia el inicio de las obras de construcción del nuevo aeropuerto internacional de Ndjili, que modernizará la infraestructura aeroportuaria del país y mejorará las condiciones de viaje de los pasajeros. Esto también promoverá el desarrollo económico y turístico de Kinshasa, atrayendo más inversiones extranjeras y facilitando el comercio.
El presidente Félix Tshisekedi debería iniciar los trabajos en los próximos días, tan pronto como su agenda lo permita. Una vez terminado, el nuevo Aeropuerto Internacional de Ndjili se convertirá en un centro aéreo moderno y eficiente, que ayudará a fortalecer la conectividad del país con el resto del mundo.
En conclusión, el inminente inicio de las obras de construcción del nuevo aeropuerto internacional de Ndjili en Kinshasa es una excelente noticia para la República Democrática del Congo. Este importante proyecto modernizará la infraestructura aeroportuaria y promoverá el desarrollo económico del país. Con la participación de la empresa Milvest y una financiación adecuada, el nuevo aeropuerto debería estar operativo en los próximos dos años, ofreciendo así mejores condiciones de viaje para los pasajeros y contribuyendo a la influencia de la capital congoleña a escala internacional.