Hoy vamos a abordar un tema candente en Polonia: la píldora del día después y el aborto. Ambos temas estaban estrictamente limitados por el anterior gobierno populista nacionalista, pero el nuevo gobierno de Polonia aprobó recientemente un proyecto de ley para abrir el acceso gratuito a la píldora del día después. Además, el Primer Ministro Donald Tusk anunció su intención de presentar un proyecto de ley destinado a liberalizar el aborto en el país.
En Polonia, un país de fuerte tradición católica, el aborto sólo está autorizado en casos de violación, incesto o cuando la vida de la madre esté en peligro. Sin embargo, en 2020, la Corte Constitucional declaró “inconstitucionales” las interrupciones de embarazos por malformaciones fetales. Esta decisión fue duramente criticada, en particular por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH), que condenó a Polonia por «violación del derecho al respeto de la vida privada» tras el caso de una joven a la que se impidió abortar debido a anomalías fetales.
Ante esta situación, la Coalición Cívica (KO) liderada por Donald Tusk tomó la delantera al proponer una legislación que permitiría el aborto legal y seguro hasta la semana 12 de embarazo. Este proyecto de ley pronto se presentará al Parlamento. Sin embargo, dentro de la coalición gubernamental, no todos los miembros están a favor de una liberalización tan amplia del derecho al aborto. La Tercera Vía, formada por el partido Polonia 2050 y el partido campesino PSL, propone en cambio un retorno a la antigua ley de 1993 que preveía un derecho muy limitado al aborto.
Paralelamente a estos avances en materia de aborto, el gobierno polaco también aprobó un proyecto de ley que permite el acceso gratuito a la píldora del día después a partir de los 15 años. Anteriormente, se necesitaba receta médica para obtener esta píldora anticonceptiva de emergencia. Esta medida tiene como objetivo facilitar el acceso a la anticoncepción de emergencia para las mujeres interesadas y evitar situaciones en las que no estuviera disponible en muchos lugares del país.
Estas decisiones marcan un importante punto de inflexión en la política polaca en materia de anticoncepción y aborto. De hecho, desde el endurecimiento de la ley en 2020, el número de abortos legales ha disminuido considerablemente, de casi 2.000 a solo 161 en 2022. Sin embargo, organizaciones feministas estiman que cerca de 100.000 mujeres interrumpen cada año su embarazo mediante el uso de pastillas abortivas. prohibido en Polonia o al viajar al extranjero.
En conclusión, estas nuevas medidas tomadas por el gobierno polaco marcan un avance significativo en el reconocimiento de los derechos de las mujeres en materia de anticoncepción y aborto.. También reflejan un cambio de actitud dentro de la sociedad polaca, que parece cada vez más abierta a la idea de permitir que las mujeres decidan sobre sus propios cuerpos. Sin embargo, la cuestión del aborto sigue siendo un tema delicado en Polonia, sobre todo debido a la influencia de la Iglesia católica y las divisiones políticas que persisten dentro de la coalición gubernamental.