Los incidentes ocurridos durante el partido entre Marruecos y la República Democrática del Congo (RDC) de la segunda jornada de la fase de grupos de la Copa Africana de Naciones (CAN) siguen dando que hablar. La Federación Congoleña de Fútbol ha anunciado que estudia recurrir el levantamiento de la suspensión del entrenador marroquí Walid Regragui, tras su participación en el tumulto que se desató tras el partido.
Inicialmente, Regragui fue suspendido por cuatro partidos por la Confederación Africana de Fútbol, pero su suspensión fue parcialmente anulada tras una apelación de la Federación Marroquí. Sin embargo, la Federación Congoleña está convencida de la injusticia de esta decisión y prevé llevar el asunto al Tribunal de Arbitraje Deportivo.
Según la Federación Congoleña, Regragui hizo confesiones detalladas y las imágenes de los disturbios dejan pocas dudas sobre su implicación. Por su parte, la Federación Marroquí sostiene que la decisión inicial fue injusta, argumentando que el técnico no tuvo un comportamiento contrario al espíritu deportivo.
Este incidente provocó tensión entre los dos equipos y también provocó reacciones negativas en línea. El capitán de la República Democrática del Congo, Chancel Mbemba, dijo que Regragui lo insultó, lo que supuestamente contribuyó al enfrentamiento entre jugadores y funcionarios de ambos equipos.
A pesar de que se le levantó parcialmente la suspensión, Regragui no participó en el último partido del grupo de Marruecos, que aseguró una victoria por 1-0 sobre Zambia. Ahora, con la apelación de la Federación Congoleña pendiente, la situación sigue siendo incierta respecto a la participación de Regragui en el próximo partido de octavos de final de su equipo contra Sudáfrica.
Este incidente pone de relieve una vez más la importancia del juego limpio y el respeto en el fútbol. Si bien la competencia deportiva suele ser acalorada, es esencial que los jugadores, entrenadores y funcionarios garanticen que se mantenga un comportamiento ejemplar en el campo.
A la espera de la decisión del Tribunal de Arbitraje Deportivo, ambos equipos tendrán que concentrarse en su próximo partido y esperar que este asunto se resuelva rápidamente para permitir que todos los involucrados se concentren plenamente en el juego.