En un caso judicial reciente, el juez Inyang Ekwo ordenó la detención de Bodejo, líder de Miyetti Allah, en las instalaciones de la Agencia de Inteligencia de Defensa (NIA), tras la expiración de la orden anterior otorgada por la Fiscalía General de la República. República (AGF) por un período de 15 días. Esta detención está pendiente de que concluya la investigación que le concierne.
El gobierno federal buscó esta medida en una moción ex parte presentada para mantener a Bodejo bajo custodia hasta que concluya la investigación y su posible comparecencia ante el tribunal. Según la declaración jurada presentada por Noma Wando, funcionaria judicial, el arresto del sospechoso se basa en acusaciones de formar una milicia armada que socava la unidad nacional, lo que constituye una amenaza a la seguridad nacional en virtud de la Ley de Prevención y Prohibición del Terrorismo de 2022.
Durante la audiencia, los abogados solicitaron un retraso de siete días para presentar cargos contra Bodejo, debido a demoras administrativas. La defensa también presentó una solicitud de aplicación de sus derechos fundamentales. Por tanto, el juez concedió a la fiscalía una semana adicional para presentar sus cargos.
Este caso destaca cuestiones de seguridad nacional y aplicación de la ley, subrayando la importancia de respetar los procesos legales para garantizar una justicia justa. Seguimos atentos al desarrollo de este asunto y su impacto en la estabilidad nacional.