La crisis humanitaria en la República Democrática del Congo (RDC) continúa empeorando y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) enfrenta una necesidad urgente de financiación de 500 millones de dólares. La creciente violencia está provocando desplazamientos masivos de población, exacerbando la crisis alimentaria en el país.
En una declaración reciente, el PMA reveló que ya había triplicado el número de personas que se beneficiaban de sus operaciones de emergencia en el este de la República Democrática del Congo, de 400.000 a 1,3 millones de personas. Sin embargo, debido a la insuficiencia de fondos, la agencia de la ONU no puede continuar brindando asistencia vital a estas personas vulnerables.
Las mujeres y las niñas, en particular las que viven en campos de desplazados, son las más afectadas por esta crisis. Están constantemente expuestas a riesgos de violencia sexual, especialmente cuando abandonan los campamentos en busca de leña u otros recursos esenciales.
Por ello, el PMA lanza un llamamiento urgente a la comunidad internacional para solicitar una financiación de 550 millones de dólares, de los cuales al menos 425 millones se necesitan para los próximos seis meses en la República Democrática del Congo, especialmente en las provincias orientales, donde la situación es más crítica.
Esta crisis humanitaria pone de relieve la urgencia de una acción concertada para satisfacer las necesidades básicas de la población congoleña. Es esencial que la comunidad internacional se movilice rápidamente para apoyar los esfuerzos del PMA y otros actores humanitarios para evitar una gran catástrofe humanitaria en la República Democrática del Congo.