El presidente Cyril Ramaphosa destacó recientemente la necesidad de una transformación urgente del sector de la biodiversidad de Sudáfrica para combatir el desempleo masivo en el país.
En un simposio sobre biodiversidad en Boksburg, Ramaphosa compartió su visión de hacer avanzar al país hacia un modelo económico centrado en la preservación del medio ambiente y la biodiversidad. Insistió en la importancia de ya no sólo exportar materias primas, sino desarrollar oportunidades de empleo en los sectores ambiental y de biodiversidad a escala nacional.
La estrategia revisada de economía de la biodiversidad del país, anunciada recientemente por la Ministra de Bosques, Pesca y Medio Ambiente, Barbara Creecy, tiene como objetivo impulsar el empleo en el sector. Promueve el uso sostenible y la valorización de las cadenas de valor comerciales vinculadas a la biodiversidad, al tiempo que promueve el desarrollo socioeconómico sostenible e inclusivo.
Ramaphosa destacó la necesidad de comprender plenamente el potencial de la economía de la biodiversidad y destacó la importancia de que el capital natural represente este sector. Este enfoque cuenta con una escala global para medir los activos y recursos naturales de un país.
El Ministro Creecy insistió en la urgencia de esta transformación sectorial para promover el desarrollo socioeconómico rural sostenible, en particular para combatir la pobreza, la desigualdad y el desempleo. También destacó la necesidad de invertir en tierras comunitarias para usos compatibles con la conservación y de abrir aún más las cadenas de valor para una mayor inclusión y un acceso equitativo a los beneficios.
En el contexto del cambio climático, Ramaphosa destacó la importancia de una transición justa hacia una sociedad baja en carbono y resiliente al clima. Destacó que esta transición debe promover la creación de empleos dignos, la inclusión social y la erradicación de la pobreza.
La implementación de estas iniciativas requerirá apoyo financiero para apoyar la conservación y promover la economía de la biodiversidad, con acceso al mercado para los productos y servicios de personas y comunidades anteriormente desfavorecidas.
La participación de los inversores es crucial para hacer realidad estos proyectos y el gobierno está comprometido a supervisarlos y facilitar su éxito. Además, Ramaphosa destacó que el nuevo marco global de biodiversidad adoptado en diciembre de 2022 debería beneficiar a las personas que viven cerca de áreas de conservación al mejorar su situación económica.