En el contexto actual, los trágicos acontecimientos que están teniendo lugar en Gaza están causando gran preocupación en todo el mundo. Informes recientes del Ministerio de Salud de Gaza revelan cifras alarmantes: ocho masacres en el espacio de 24 horas, que provocaron la pérdida de 89 vidas humanas y heridas a 120 personas. Estos nuevos incidentes elevan el número total de víctimas del ataque israelí desde el 7 de octubre a 33.634 muertos y 76.214 heridos. Estas cifras son realmente impactantes y demuestran la violencia sin precedentes que azota a la región.
Se han intensificado los ataques del ejército israelí, dirigidos deliberadamente a varias zonas de la Franja de Gaza. Los civiles son las primeras víctimas de esta escalada de agresión, como lo demuestra el ataque contra una escuela primaria situada frente a la escuela Al-Orouba en el nuevo campamento de Nuseirat, donde varias personas murieron o resultaron heridas. Los ataques de artillería israelí también cayeron sobre zonas al norte del campamento, mientras que los ataques aéreos alcanzaron tierras agrícolas cerca de la compañía eléctrica al norte del campamento.
El bombardeo también afectó a zonas como el este del campamento de Maghazi y los alrededores del puente Wadi Gaza. Los barrios de Al-Dawa, Ard Al-Mufti, New Camp, Al-Mughraqa y Al-Zahraa, al norte del campo de Nuseirat, también fueron atacados por el ejército israelí. En el norte de la Franja de Gaza, al menos 25 palestinos perdieron la vida tras un bombardeo que alcanzó la casa de la familia Tabatibi en el barrio de Daraj, en el corazón de la ciudad de Gaza.
Además, las autoridades israelíes obstaculizaron la entrega de ayuda, llegando incluso a asesinar al jefe de policía de Jabalia-Al-Nazla, Radwan Radwan, también responsable del comité para garantizar la ayuda en el norte de la Franja de Gaza, durante una operación contra su casa. Estos trágicos acontecimientos ponen de relieve la dramática situación que afrontan los habitantes de Gaza, atrapados en una espiral de violencia que no da señales de terminar.
Es imperativo que la comunidad internacional actúe con urgencia para poner fin a estas atrocidades y trabajar por una paz duradera en la región. Los civiles de Gaza merecen nuestro apoyo y solidaridad ante esta tragedia que no puede continuar. La violencia no puede ser una respuesta y sólo el camino del diálogo y la negociación puede hacer posible establecer una paz verdadera y duradera en la región.
Fuentes adicionales:
– Israel’s Massacres in Gaza Continue with 89 People Killed and 120 Injured in 24 Hours
– La Emergencia Humanitaria en Medio Oriente: un Llamado a la Solidaridad Internacional