La situación de seguridad en Beni, en la provincia de Kivu del Norte en la República Democrática del Congo, ha causado recientemente gran preocupación dentro de la Nueva Sociedad Civil. De hecho, esta organización pidió medidas estrictas contra determinados soldados de las Fuerzas Armadas de la República Democrática del Congo (FARDC), sospechosos de estar implicados en actos de delincuencia urbana.
La principal preocupación de Nueva Sociedad Civil reside en las acciones de estos militares, acusados de haber herido a balazos a civiles en el distrito de Vimbwembwe, situado cerca de Beni, en el eje Kasindi. Además de estos actos de violencia, los soldados también son señalados por casos de extorsión de bienes y dinero a la población local.
Según Meleki Mulala, director de Nueva Sociedad Civil, tales acciones no sólo comprometen la seguridad de los residentes, sino que también corren el riesgo de socavar la confianza entre la población civil y las fuerzas del orden. Esta situación también podría desalentar la cooperación civil en los esfuerzos de consolidación de la paz en la región.
Ante estos alarmantes hallazgos, la sociedad civil hace un llamado a las autoridades militares a tomar medidas apropiadas para sancionar a los militares involucrados en este comportamiento reprobable. Meleki Mulala insiste en la necesidad de hacer cumplir la ley y castigar a los infractores de acuerdo con el código penal militar. Subraya la importancia de preservar la dignidad de los civiles inocentes y garantizar un clima de seguridad propicio para la reconciliación y la estabilidad en la región.
Además, la Nueva Sociedad Civil fomenta una mejor comunicación y colaboración entre civiles y militares, con el fin de promover una convivencia pacífica y armoniosa. Meleki Mulala pide una reflexión profunda por parte de los militares para supervisar y orientar a los jóvenes reclutas desplegados sobre el terreno y evitar así cualquier violación de los derechos de los ciudadanos.
A la espera de los resultados de las investigaciones en curso, llevadas a cabo en colaboración con las autoridades locales, la sociedad civil permanece alerta y espera que se tomen medidas eficaces para llevar a los soldados implicados ante la justicia. Es esencial una estrecha cooperación entre los actores locales y militares para poner fin a estas prácticas perjudiciales para la paz y la seguridad de las poblaciones.
En resumen, la Nueva Sociedad Civil del Beni pide medidas firmes y rápidas para restablecer la confianza entre los civiles y las fuerzas armadas y garantizar un entorno seguro y pacífico dentro de la comunidad local. La responsabilidad recae en todos los actores implicados para prevenir posibles desvíos y promover una convivencia armoniosa en la sociedad.