Este día 28 de marzo de 2024, Rusia, miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU, se pronunció sobre la crisis en la República Democrática del Congo (RDC), enfatizando la importancia de una solución política para garantizar una estabilidad duradera en la región. . Dmitri Polyanskiy, representante permanente adjunto de Rusia, destacó el impacto directo de esta crisis en todos los Grandes Lagos y en las relaciones interestatales.
Moscú insiste en la necesidad de intensificar la mediación regional para aliviar las tensiones entre Kinshasa y Kigali. Según Dmitri Polyanskiy, es fundamental que todas las formaciones paramilitares ilegales depongan las armas y se unan al programa de desarme, desmovilización y reintegración sin condiciones previas. Rusia condena enérgicamente las acciones ofensivas del M23 y pide el fin de los bombardeos que causan sufrimiento a los civiles.
Además, Rusia tomó nota de la decisión de la Unión Africana de otorgar sus auspicios a las fuerzas de la Comunidad de Desarrollo del África Austral (SADC) para apoyar a Kinshasa. Dmitri Polyanskiy destacó la importancia de coordinar eficazmente acciones con la MONUSCO para superar la crisis.
Rusia dijo que estaba dispuesta a discutir modalidades de asistencia a las fuerzas regionales a través de la MONUSCO tras la publicación de un informe de la secretaría de la ONU previsto para junio. Esta posición de Rusia subraya su compromiso de contribuir a la resolución de la crisis en la República Democrática del Congo de manera política y pacífica.
En conclusión, la declaración de Rusia enfatiza la necesidad de un enfoque político y una mediación regional para poner fin a las hostilidades y crear condiciones para una estabilización duradera en la región de los Grandes Lagos.