La provincia de Kasai Oriental está conmocionada por la reciente alerta lanzada por la Dirección Provincial de REGIDESO sobre la extracción ilícita de diamantes en su cuenca hidrográfica de Lukelenge, situada en el territorio de Katanda. Esta preocupante situación pone de relieve un grave problema que podría tener graves consecuencias para el acceso al agua potable en la ciudad de Mbuji-Mayi.
El director de REGIDESO, Didier Mbudi, subrayó el peligro que representa esta minería que se lleva a cabo bajo la mirada de la policía, que debe proteger esta zona desde hace casi dos años. Teme que esta actividad comprometa la calidad del agua del río Lubilanji, poniendo así en peligro el suministro de agua potable de toda la ciudad.
Además de la posible contaminación del río, Didier Mbudi también destacó la falta de equipos in situ para tratar las aguas superficiales, lo que agrava aún más la situación. Advirtió del riesgo de suspensión de la financiación de un proyecto en curso en la región, escenario que tendría consecuencias desastrosas para la población de Mbuji-Mayi.
Ante esta crítica situación, fuentes policiales anunciaron un allanamiento al lugar para evaluar más de cerca la situación. Es crucial que se tomen rápidamente medidas apropiadas para poner fin a esta explotación ilícita y prevenir cualquier desastre ambiental que pueda resultar de estas actividades.
Es esencial que las autoridades locales y nacionales tomen medidas estrictas para proteger los recursos naturales de la región y garantizar el acceso al agua potable para todos los residentes. La minería ilegal no puede tener prioridad sobre la salud y el bienestar de las poblaciones locales, y es hora de actuar antes de que sea demasiado tarde.