El nombre de un exjugador del Kisumu All Stars FC ha encabezado las noticias recientemente, luego de que fuera encontrado en su escondite en Obunga, región de Kisumu. Durante meses había eludido a los detectives que investigaban un trágico caso de asesinato que dejó a un comerciante de 23 años muerto y a su marido gravemente herido.
La fallecida, de nombre Grace Awino Adero, se encontraba regentando un puesto de Mpesa en la zona de Kondele, cuando aparecieron dos sujetos armados que los atacaron, sustrayendo la recaudación del día y asesinando a la joven. Los asesinos, que se cree que son miembros de una banda organizada, huyeron en una motocicleta no identificada y se refugiaron en un escondite en Kasagam, condado de Kisumu.
Horas más tarde, la policía de Kasagam que patrullaba vio y se enfrentó a cinco ocupantes de un automóvil sospechoso (KDL 301P Toyota Axio), encontrado estacionado en un lugar oculto, pero huyeron, abandonando el vehículo. Luego, los detectives siguieron el caso y lograron desmantelar la banda criminal detrás del trágico suceso después de meses de investigación.
Uno de los sospechosos, Byron Billy Owuor, de 26 años, exfutbolista del club Kisumu Allstars, finalmente fue expulsado de su escondite en Obunga, en el área de Kasarani en Kisumu Central, por la policía con base en Kondele. Fue presentado ante el tribunal de magistrados principales de Winam, donde a los investigadores se les dio 14 días adicionales para completar la investigación.
Una investigación exhaustiva permitió a la policía identificar a Robert Wakolo Okoth, alias Michael Osama, considerado el cerebro de las operaciones criminales de esta banda y el cabecilla. Durante una redada en su casa, las fuerzas del orden confiscaron un cargador AK47 cargado con 30 cartuchos de munición de 7,62 x 39 mm, 6 cartuchos de munición de calibre .38 disparados con pistolas, cinco tarjetas de identificación de diferentes personas y una tarjeta de la Asociación de Camaradas de las Fuerzas Armadas de Kenia. , un teléfono móvil y un bolso de camuflaje verde.
Esta importante operación permitió también detener al hermano del supuesto líder de la banda, de 17 años y considerado miembro activo de la banda criminal.
Los esfuerzos de las fuerzas del orden para poner fin a las acciones de esta notoria pandilla demuestran su determinación de garantizar la seguridad de los ciudadanos y llevar ante la justicia a los responsables de actos criminales tan atroces.
En un contexto donde el crimen organizado sigue siendo un gran desafío, estas acciones demuestran la importancia crucial de la cooperación entre las autoridades y la comunidad para prevenir tales actos y garantizar la seguridad de todos. La detención de estas personas genera esperanzas de que la justicia seguirá su curso y disuadirá a otros delincuentes de cometer actos tan reprensibles.