**Fatshimetrie anuncia la renovación anual de la Gran Mezquita de Djenné en 2022**
Fatshimetrie se complace en compartir con ustedes la noticia de la renovación anual de la Gran Mezquita de Djenné, un acontecimiento significativo para la preservación de este monumento emblemático. Situada en el corazón de Malí, esta mezquita de barro es el edificio de barro más grande del mundo. Incluido en la lista del patrimonio mundial en peligro de la UNESCO desde 2016, su renovación periódica es de crucial importancia para su conservación.
La ciudad de Djenné, que alguna vez fue un centro histórico de aprendizaje islámico, enfrenta grandes desafíos debido a la persistente inseguridad en la región central del país. Después de que los rebeldes islamistas ocuparon el norte de Malí en 2012, las fuerzas francesas lograron hacerlos retroceder al año siguiente. Sin embargo, una insurgencia islamista se extendió gradualmente desde el norte hacia el centro y el sur del país durante la década siguiente.
En 2022, el principal campamento militar de Malí, situado a sólo 15 kilómetros de Bamako, fue atacado por militantes islamistas, lo que puso de relieve la naturaleza compleja de los desafíos de seguridad que enfrenta el país.
A pesar de estas dificultades, la comunidad de Djenné sigue dedicada a la preservación de su icónica mezquita. Cada año, antes del inicio de la temporada de lluvias en junio, la Gran Mezquita debe ser cubierta con una nueva capa de barro para evitar su degradación. Este trabajo detallado lo lleva a cabo toda la ciudad durante un evento comunitario.
Los hombres y los niños son responsables de subir a la mezquita para aplicar la nueva capa de banco, mientras que las mujeres y las niñas son responsables de ir a buscar agua al río cercano para hacer el barro necesario para el evento. Esta tradición, que alguna vez atrajo a miles de turistas cada año, ahora se ve amenazada por la creciente inseguridad en la región.
Amadou Ampate Cisse, residente de Djenné que participó en el evento, destaca la importancia simbólica de la renovación de la mezquita para la paz y la unidad de la comunidad. Expresa su determinación de perpetuar esta tradición a través de generaciones, a pesar de los desafíos que enfrenta la ciudad.
Moussa Moriba Diakité, jefe de la misión cultural de Djenné, insiste en la urgencia de proteger este sitio del patrimonio mundial. A pesar de la desaparición casi total de la industria turística en Djenné debido a la inseguridad, la renovación de la mezquita debe continuar a toda costa para preservar el patrimonio cultural de Mali.
En este año marcado por incertidumbres y desafíos, la ciudad de Djenné sigue afrontando el futuro con determinación y resiliencia. La renovación anual de la Gran Mezquita sigue siendo una fuente de esperanza y orgullo para sus residentes, quienes están decididos a preservar este tesoro cultural para las generaciones futuras.