**Fatshimetrie: Patrullas mixtas de la PNC y las FARDC en Kinshasa tras un golpe fallido**
En un contexto de tensión e incertidumbre, la Policía Nacional Congoleña (PNC) y las Fuerzas Armadas de la República Democrática del Congo reaccionaron enérgicamente lanzando patrullas mixtas por toda la ciudad de Kinshasa. Esta iniciativa sigue al intento de golpe que sacudió la capital congoleña y puso de relieve las fallas de seguridad dentro del país. La noche del martes 21 de mayo de 2024 marcó el inicio de estos patrullajes conjuntos, decididos durante una reunión de seguridad entre el Comisario General de la PNC, Benjamín Alongaboni, y el comandante regional de las FARDC.
El objetivo principal de estas patrullas es garantizar la seguridad de los habitantes de Kinshasa y de sus bienes, en un clima de incertidumbre y desconfianza tras el fallido intento de golpe de estado. Las autoridades también subrayaron el deseo de combatir las actividades ilegales, como los mercados piratas y la contaminación acústica, que contribuyen a la inseguridad de la población.
Cabe destacar que estas patrullas mixtas se enmarcan en un contexto más amplio de lucha contra la inseguridad en la República Democrática del Congo. De hecho, unas semanas antes, el Ministro del Interior había lanzado la operación “Pantera Negra” en Kinshasa, con el objetivo de localizar a los delincuentes y reducir la delincuencia en la capital.
El intento de golpe de Estado del domingo 19 de mayo, visiblemente frustrado por las autoridades, puso de relieve las debilidades del sistema de seguridad del país. Según la información transmitida por el portavoz de las fuerzas armadas congoleñas, un grupo armado intentó apoderarse del palacio de la nación en Kinshasa, lo que provocó enfrentamientos y pérdidas de vidas humanas.
Las medidas tomadas por el gobierno para fortalecer la seguridad de las instituciones y funcionarios son cruciales en tal contexto de inestabilidad. La colaboración entre la PNC y las FARDC a través de estas patrullas conjuntas es una fuerte señal enviada a la población, mostrando la determinación de las autoridades de garantizar la seguridad y la estabilidad del país.
En este período turbulento, la unidad y coordinación entre las diferentes fuerzas de seguridad son esenciales para enfrentar las amenazas internas y externas. La presencia de patrullas mixtas en las calles de Kinshasa es una garantía de vigilancia y capacidad de respuesta a los desafíos de seguridad que enfrenta la República Democrática del Congo.
En conclusión, las patrullas mixtas de la PNC y las FARDC en Kinshasa tras el fallido intento de golpe de Estado demuestran la necesidad de una respuesta firme y coordinada a las amenazas que pesan sobre la seguridad del país. El trabajo conjunto de las fuerzas del orden es esencial para restablecer la confianza de los ciudadanos y garantizar un clima de estabilidad propicio para el desarrollo de la República Democrática del Congo.