La cumbre internacional de mayores de África y sus diásporas organizada por la Red Internacional Francófona de Mayores (RIFA) es un evento de capital importancia que comenzó este sábado 25 de mayo en Kinshasa. En el corazón del Día Mundial de África, este evento adquiere un significado particular al resaltar los problemas y desafíos que enfrentan nuestros mayores.
Bajo el liderazgo de la presidenta nacional de RIFA-RDC, Madame Marie Thérèse Chirishungu Pay Pay, esta cumbre aspira a ser mucho más que una simple reunión internacional. De hecho, su objetivo es movilizar a las personas mayores para que puedan recuperar un lugar destacado en la sociedad. El llamamiento lanzado por la señora Chirishungu Pay Pay resuena como un himno a la acción y al compromiso de nuestros mayores por un mundo mejor.
Los conmovedores testimonios de participantes como Charlotte Kashamura resaltan las dificultades que enfrentan muchas personas mayores en África. El acceso a una atención sanitaria adecuada es un derecho fundamental que todavía parece descuidarse con demasiada frecuencia. Es imperativo que los gobiernos tomen medidas concretas para garantizar una atención médica adecuada a nuestras personas mayores.
El aspecto internacional de esta cumbre, que reúne a participantes de varios países africanos, crea una sinergia única en su tipo. Los intercambios de experiencias y debates sobre los desafíos comunes que enfrentan las personas mayores permiten crear puentes sólidos y duraderos entre diferentes naciones.
Más allá de las conclusiones, esta cumbre pretende ser un vector de acción y solidaridad a favor de nuestros mayores. Al involucrar a actores de la sociedad civil, gobiernos e instituciones internacionales, se trata de construir juntos un futuro en el que las personas mayores sean plenamente reconocidas y valoradas por su papel esencial dentro de nuestras sociedades.
La Cumbre Internacional de Ancianos de África y sus Diásporas representa una oportunidad única para reafirmar la importancia de nuestros mayores y defender vigorosamente sus derechos. Al compartir sus experiencias y situar la acción colectiva en el centro de su enfoque, los participantes en este evento van más allá de los discursos para infundir un nuevo viento de esperanza y cambio para las generaciones futuras.