El Real Madrid escribió el sábado por la noche una nueva página de su leyenda al conquistar su decimoquinta Liga de Campeones de la UEFA, una hazaña excepcional que confirma su dominio en la escena europea. El choque contra el Borussia Dortmund resultó ser un partido intenso, donde el realismo del Madrid finalmente pudo más que los valientes pero desafortunados alemanes.
En esta esperada final, Carvajal abrió el marcador en el minuto 74, poniendo en ventaja al Real Madrid gracias a un precioso cabezazo cruzado tras un centro perfecto de Kroos. El logro dio el impulso necesario para que los de Zidane se adelantaran y aumentaran la presión sobre un Dortmund que buscaba respuestas.
La eficacia de Vinicius selló la victoria del Madrid, anotando su sexto gol de la temporada en la Liga de Campeones en el minuto 83. Su precisión y determinación volvieron a marcar la diferencia, confirmando su condición de pieza clave dentro del conjunto merengue.
A pesar del compromiso real y del deseo de cambiar el rumbo, el Borussia Dortmund se topó con una defensa sólida y con mala suerte, como lo demuestra el gol anulado a Fullkrug en los últimos minutos del partido por fuera de juego. Una decisión arbitral que acabó con las esperanzas de los alemanes y confirmó la supremacía del Madrid en esta final.
Zinédine Zidane, icono del Real Madrid como jugador y ahora como entrenador, pudo blandir con orgullo la Copa de la UEFA Champions League, símbolo del éxito y la excelencia de un club que sigue escribiendo su historia de éxito. Esta coronación recuerda una vez más que el Real Madrid sigue siendo un referente indiscutible en el panorama europeo, dispuesto a desafiar a cualquiera en su camino hacia la gloria.