El eco de la triste noticia resuena en las más altas esferas espirituales este sábado 1 de junio en Montreal, Canadá. El mundo ha perdido a un ilustre guía espiritual en la persona del pastor Baruti Kasongo, una figura eminente de la Iglesia del Tabernáculo Baruti, que murió de una enfermedad a la edad de 77 años. Ha fallecido un hombre de talla excepcional, dejando tras de sí un innegable legado espiritual y humano.
El pastor Baruti Kasongo dejó su huella en el panorama religioso durante casi medio siglo, dedicando gran parte de su vida a su ministerio. Fue durante más de 34 años que asumió las responsabilidades de “pastor del mensaje del fin de los tiempos del profeta William Marrion Branham” en la República Democrática del Congo. Su compromiso inquebrantable y su ardiente predicación tocaron muchas vidas, inscribiendo su nombre en los anales de la historia religiosa de la región.
Más allá de sus sermones inspiradores, el pastor Baruti Kasongo también fue reconocido por su amabilidad y disponibilidad hacia sus fieles. Su cálida voz resonó en corazones y mentes iluminadas, guiando a su rebaño por el camino de la fe y la compasión. Su partida deja un inmenso vacío en la comunidad religiosa que hoy llora la pérdida de un guía espiritual amado y respetado.
Los homenajes llegan de todas partes, lo que demuestra la profunda gratitud y admiración que despertó el pastor Baruti Kasongo. Su fe inquebrantable, su sabiduría y su generosidad quedarán grabadas en la memoria de quienes tuvieron la suerte de cruzarse en su camino. En este momento de duelo, los corazones duelen y se elevan oraciones para acompañar al pastor Baruti Kasongo en su último viaje.
Así, el anuncio de la muerte del pastor Baruti Kasongo en Montreal, Canadá, resuena como un dolor de corazón, pero también como un recordatorio vibrante del impacto positivo que una vida dedicada a Dios puede tener en los demás. Su legado espiritual perdurará y continuará inspirando a las generaciones futuras a recorrer el camino de la fe y el amor. En este día de luto, recordemos al pastor Baruti Kasongo con respeto y gratitud, y sigamos honrando su memoria a través de nuestras acciones y oraciones.