Frente a Togo el 9 de junio de 2023, la selección de la República Democrática del Congo demostró una unidad y una determinación impecables. Al utilizar el mismo once inicial que en su último partido contra Senegal, el seleccionador Sébastien Desabre demostró claramente su confianza en su equipo. El único cambio a destacar en defensa, la sustitución de Inonga por Batubinsika, demostrando así el deseo de aportar frescura y solidez a la retaguardia de los Leopards.
La elección de Dimitri Bertaud en la portería, asociada a una defensa compuesta por Chancel Mbemba, Dylan Batubinsika, Arthur Masuaku y Axel Tuanzebe, demuestra la voluntad de mantener cierta estabilidad y rigor táctico. En el centro del campo, la creatividad de Charles Pickel, Samuel Moutoussamy y Gaël Kakuta resultó ser una gran baza para la construcción del fútbol congoleño.
En ataque, la velocidad y la percusión de Yoane Wissa, Meschack Elia y Samuel Essende plantearon serios problemas a la defensa togolesa. Este trío de ataque supo ser complementario y efectivo, creando huecos en la defensa contraria y generando varias ocasiones claras.
La rueda de prensa de Sébastien Desabre también estuvo marcada por un discurso lleno de determinación y voluntad de ganar. El objetivo declarado era claro: buscar el primer puesto en estas eliminatorias para el Mundial de 2026. Esta ambición mostrada por el técnico ciertamente galvanizó a sus jugadores y reforzó su motivación para obtener un resultado positivo contra Togo.
En un clima de serenidad y confianza, los Leopardos de la República Democrática del Congo demostraron que estaban dispuestos a afrontar los desafíos que se interponían en su camino. Con un colectivo sólido y una estrategia bien definida, la selección congoleña ha demostrado que tiene los recursos necesarios para competir con las mejores selecciones del continente africano.
El partido contra Togo fue una oportunidad para que la República Democrática del Congo confirmara su ascenso al poder y recordara a la gente que es un equipo al que hay que tomar en serio. Los aficionados congoleños pueden estar orgullosos de sus jugadores, que demostraron un compromiso total en el campo y un deseo de superarse para alcanzar sus objetivos.
En conclusión, la actuación de la selección de la RDC contra Togo fue notable en muchos aspectos. Con un once inicial sólido y jugadores con talento, el equipo demostró que tenía los medios para ascender a lo más alto del fútbol africano. Ahora queda confirmar estas grandes promesas en el tiempo y seguir trabajando para alcanzar los objetivos marcados.