Fatshimetrie analiza la alarmante situación de los niños que trabajan en las minas artesanales en la República Democrática del Congo (RDC), un problema que sigue preocupando y movilizando a las organizaciones internacionales de protección de la infancia.
De hecho, UNICEF destacó recientemente que más de trescientos mil niños están actualmente sometidos a condiciones de trabajo peligrosas en las minas de las provincias de Lualaba y Haut-Katanga. Estos niños contribuyen directamente a la producción de minerales, en particular cobalto, un recurso esencial y lucrativo.
Grant Leaty, representante de UNICEF en la República Democrática del Congo, expresó su profunda preocupación por esta preocupante situación. Según él, es imperativo actuar rápida y concertadamente para poner fin a esta explotación de niños en las minas. Hizo un llamamiento urgente a todas las partes interesadas del sector minero para que cooperen y adopten medidas concretas para proteger a estos niños vulnerables.
Cabe señalar que UNICEF ya ha implementado iniciativas destinadas a liberar a más de 70.000 niños de minas y situaciones vulnerables en las provincias de Lualaba y Haut-Katanga durante los últimos dos años. Sin embargo, queda mucho por hacer para garantizar la protección de todos los niños expuestos a estas condiciones laborales inaceptables.
Es imperativo que el sector minero, ya sea formal o informal, asuma su responsabilidad y participe activamente en la lucha contra el trabajo infantil. Es fundamental establecer mecanismos de control eficaces para garantizar que la cadena de suministro de minerales, incluido el cobalto, esté libre de todas las formas de explotación infantil.
En última instancia, es nuestro deber como sociedad garantizar que todos los niños puedan disfrutar de sus derechos fundamentales, incluido el derecho a ser protegidos de toda forma de trabajo que sea peligroso y perjudicial para su salud y su desarrollo. Es hora de actuar colectivamente y de manera coordinada para poner fin a esta realidad desgarradora e inaceptable.