Fatshimétrie destacó recientemente una situación preocupante en el pueblo de Mateko, situado en el territorio de Idiofa, en la provincia de Kwilu. De hecho, una serie de ataques de perros callejeros han sembrado el terror entre los residentes, causando heridas a al menos 17 personas y, lamentablemente, provocando dos muertes.
Los supervivientes, quince en total, fueron tratados rápidamente y ahora se encuentran en cuidados intensivos en el hospital local. Las autoridades sanitarias de la región deben actuar urgentemente para evaluar el riesgo de rabia que podrían derivar de estos ataques. Lamentablemente, parece faltar comunicación por parte de las autoridades provinciales sobre este tema crucial, lo que deja a la población local indefensa ante esta alarmante situación.
El presidente de la sociedad civil local, Freddy Kayiba, dio la voz de alarma sobre la gravedad de la situación y describió cómo los perros atacaban a los residentes de forma impredecible. La decisión de los aldeanos de sacrificar a todos los perros callejeros para protegerlos es comprensible, pero también plantea dudas sobre las medidas para prevenir y controlar las enfermedades transmitidas por perros.
Este aumento de los ataques de perros callejeros en Idiofa recuerda a un hecho similar ocurrido hace casi 11 meses, donde unas 20 personas fueron mordidas, provocando la trágica pérdida de tres vidas. Es imperativo que se tomen medidas adecuadas para evitar que este tipo de tragedias vuelvan a ocurrir en el futuro.
En este período de crisis sanitaria mundial, donde la vigilancia de la salud pública es primordial, es crucial que las autoridades provinciales tomen las medidas adecuadas para garantizar la seguridad y el bienestar de la población local. Es necesario establecer protocolos claros para la prevención de enfermedades transmitidas por perros callejeros, así como para la gestión de situaciones de emergencia como los recientes ataques en Mateko.
En conclusión, es fundamental que se tomen acciones concertadas para proteger a la población contra los riesgos asociados a los perros callejeros, garantizando al mismo tiempo una comunicación transparente y eficaz por parte de las autoridades sanitarias. La seguridad y la salud de los residentes de Mateko y sus alrededores deben ser una máxima prioridad para evitar más tragedias similares a las que han azotado recientemente a la comunidad.