En la pequeña ciudad de Buguma, lugar de nacimiento de Asari-Toru LGA en Nigeria, un escenario de agitación política ha cautivado recientemente a los residentes. Los partidarios del ex presidente local, Onengiyeofori George, se han reunido para expresar su apoyo al Ministro del Territorio de la Capital Federal (FCT), Nyesom Wike. Caminando por las calles de la ciudad, cantaron al unísono, portando carteles que pedían a la policía que mantuviera su presencia en la sede del ayuntamiento.
Los mensajes mostrados en los carteles eran inequívocos, exigiendo que «Sim Fubara no puede hacer lo que le plazca» y afirmando que «no hay ninguna vacante en el consejo Asari-Toru». A pesar de las advertencias del Comando de la Policía Estatal de Rivers contra las protestas, los ex líderes de la LGA pro-Wike han desafiado las prohibiciones para expresar su apoyo.
Otra protesta tuvo lugar en Abonnema, la sede de Akuku-Toru LGA, a favor de que la policía siguiera cerrando las instalaciones del consejo. El control de las secretarías de las 23 AGL en la región del Delta del sur de Nigeria fue asumido por las fuerzas de seguridad la semana pasada debido a la crisis provocada por la expiración del mandato de tres años de los ex presidentes de las AGL, que se saldó con tres muertes. .
El gobernador Siminalayi Fubara nombró apresuradamente a 23 presidentes de comités interinos, pero la policía continúa bloqueando el acceso a las instalaciones del consejo para evitar más problemas. Dirigiéndose al nuevo presidente de los comités interinos, el gobernador Fubara aconsejó trabajar de forma remota si temían que su presencia perturbara la paz en el estado.
Dijo: «Permítanme advertirles también que cuando reanuden sus funciones en sus respectivas comunidades, no quiero ver ningún enfrentamiento. No está en mi naturaleza, no es mi estilo. Sea lo que sea lo que pasó ayer, lo sé. el mundo sabe que no vino de vosotros. Permítanme advertirles también que cuando reanuden sus funciones en sus respectivas comunidades, no quiero ver ningún enfrentamiento en mi carácter, no es mi estilo».
Así, la tensa situación política en la región sigue dando lugar a reacciones y tensiones. Las manifestaciones y las acciones de las autoridades locales muestran la importancia de las cuestiones en juego y la urgencia de encontrar soluciones pacíficas para preservar la estabilidad de la región. El diálogo y la colaboración entre diferentes actores podrían resultar esenciales para garantizar un futuro pacífico y próspero para todos los habitantes de la región.