Gestión de desastres naturales en Abiyán: cuestiones y acciones prioritarias

Accueil » Gestión de desastres naturales en Abiyán: cuestiones y acciones prioritarias

Fatshimetria
La ciudad de Abiyán, capital económica de Costa de Marfil, fue recientemente escenario de fuertes lluvias que provocaron inundaciones y deslizamientos de tierra, provocando la muerte de al menos 24 personas. Las autoridades, alertadas por la gravedad de la situación, calificaron estas precipitaciones de excepcionales, llegando a algunas zonas a recibir más de 200 milímetros de agua en un solo día, cuatro veces el volumen habitual.

Los barrios informales se vieron particularmente afectados por este mal tiempo, debido a una red de drenaje ineficiente y a la construcción desordenada de viviendas, a menudo erigidas sin respetar las normas vigentes. La vulnerabilidad de estas viviendas precarias a los riesgos naturales se ha vuelto a manifestar de forma trágica.

Además del elevado costo humano, estas inundaciones y deslizamientos de tierra también causaron importantes daños materiales en toda la ciudad, sumergiendo viviendas y obstruyendo carreteras. Más de 271 personas tuvieron que ser rescatadas tras el mal tiempo, lo que ilustra la magnitud del desastre y la necesidad de una respuesta urgente y coordinada por parte de las autoridades.

Hay que recordar que, ante el riesgo de inundaciones mortales, las autoridades habían procedido el año anterior a la demolición de construcciones ilegales construidas a lo largo de una laguna en Abiyán. Estas medidas preventivas, aunque necesarias, revelan la urgencia de abordar las cuestiones de la urbanización y la planificación urbana de una manera más global en un contexto de cambio climático cada vez más acusado.

En conclusión, las recientes inundaciones y deslizamientos de tierra en Abiyán ponen de relieve la necesidad de una gestión sostenible y responsable de los espacios urbanos, teniendo en cuenta los desafíos que plantea el calentamiento global y fortaleciendo la resiliencia de las poblaciones más vulnerables frente a estos eventos extremos. La tragedia que vivió la ciudad debe servir de advertencia para una acción concertada y proactiva en la prevención de desastres naturales y la gestión de riesgos en un contexto cada vez más incierto.

Leave a Reply

Your email address will not be published.