Fatshimetrie destacó recientemente una triste realidad en Butembo (Kivu del Norte): más de diez personas desplazadas por la guerra perdieron la vida en cinco días. Las razones de estas muertes son diversas y van desde el hambre hasta la malaria y otras condiciones precarias. Estas víctimas, originarias de los ataques de las ADF en Cantine y Mangurejipa, encontraron refugio en Butembo, pero ahora se enfrentan a nuevas pruebas.
El presidente de la oficina del comité de desplazados internos de Butembo, Vake Kavira Vayivwira, destacó la urgencia de la situación. Los desplazados llegan a pie, hambrientos y exhaustos; algunos de ellos nunca han abandonado sus regiones de origen. Esta transición repentina los expone a graves riesgos, como la anemia y la malaria, causados por un clima diferente y condiciones de vida precarias.
Ante esta crisis humanitaria, Vayivwira hace un llamado al gobierno y a la generosidad de las personas de buena voluntad para que acudan en ayuda de estas poblaciones vulnerables. Subraya la urgencia de llevar alimentos, medicinas y ropa a los desplazados que acuden en masa a Butembo. La ciudad se ve abrumada por esta afluencia continua de personas desarraigadas, de procedencia diversa y con necesidades más urgentes.
Restaurar la seguridad es una prioridad para permitir que estas personas desplazadas regresen a sus hogares. Vayivwira espera que las autoridades tomen medidas rápidas para garantizar un regreso seguro a estas personas desplazadas, de modo que puedan volver a algo parecido a la normalidad en su vida diaria.
La situación en Butembo expone la fragilidad de las poblaciones desplazadas y subraya la importancia de la ayuda humanitaria y la solidaridad para afrontar estas crisis. Es esencial crear conciencia sobre las condiciones precarias en las que viven estas personas desplazadas, con el fin de movilizar recursos y acciones concretas para apoyarlas en esta difícil prueba.
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