En un reciente suceso que ha provocado la indignación de la población de Beni, en la provincia de Kivu del Norte, cuatro militares congoleños han sido detenidos por actos de acoso en carretera. El incidente tuvo lugar en el puente de Semuliki, en la carretera que une Beni con Kasindi, donde estos militares eran los encargados de garantizar la seguridad.
Las autoridades locales revelaron que militares habían instalado una barrera ilegal cerca del puente, exigiendo pagos injustificados a los usuarios, especialmente a los conductores de motocicletas y vehículos. Los usuarios se vieron obligados a pagar sumas que oscilaban entre 1.000 y 5.000 francos congoleños, o incluso más, según los tiempos de paso.
Esta práctica abusiva provocó la ira de la población local y de la sociedad civil, que denunciaron periódicamente estas acciones durante diversas reuniones con las autoridades. El mayor general Bruno Mandevu, comandante de las operaciones Sukola 1 Grand Nord, fue testigo de esta situación durante una visita de inspección a la región de Ruwenzori. Sorprendido por las prácticas ilegales de los soldados, ordenó su inmediata detención.
Este asunto puso de relieve el comportamiento reprensible de ciertos miembros de las fuerzas armadas congoleñas, que empaña la imagen de la institución militar y socava la confianza entre civiles y militares. El mayor general Mandevu subrayó la importancia de respetar las misiones de defensa y seguridad asignadas a las fuerzas armadas, subrayando que ese acoso en las carreteras es inaceptable.
Además de los abusos cometidos por grupos armados, ahora está claro que algunos militares también cometen delitos al aprovechar su posición para extorsionar a los ciudadanos. Esta situación pone de relieve la urgencia de que el gobierno actúe para poner fin a estas prácticas y restablecer la confianza de la población en las fuerzas de seguridad.
El Comandante de Operaciones Sukola 1 Grand Nord está comprometido a garantizar que los residentes puedan moverse con libertad y seguridad, al tiempo que fomenta la colaboración civil-militar efectiva para promover la paz y la estabilidad en la región. Este caso de acoso vial pone de relieve la necesidad de una reforma profunda de las prácticas dentro de las fuerzas armadas congoleñas, para garantizar el respeto de la ley y los derechos de los ciudadanos.
En conclusión, la detención de estos militares por acoso vial en Beni subraya la importancia de la transparencia, la rendición de cuentas y la integridad dentro de las fuerzas de defensa y seguridad, para garantizar la protección y el bienestar de las poblaciones locales.
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