La gran reunión de líderes tradicionales congoleños en Kinshasa para protestar contra el apoyo internacional a los autores de las masacres en el este de la República Democrática del Congo marcó un paso importante en la lucha por la paz y la soberanía del país. Bajo el liderazgo de Su Majestad Lemba Lemba, la voz de las autoridades tradicionales y consuetudinarias resonó fuerte y clara frente a la Embajada de los Estados Unidos.
La movilización de los líderes tradicionales adquiere un carácter simbólico e histórico, mostrando que la sociedad civil congoleña en toda su diversidad está unida en su denuncia de las injerencias extranjeras y de los actos de violencia que están desgarrando el este del país. Los carteles que proclaman su apoyo a la presidencia de Félix Tshisekedi subrayan la importancia de la unidad nacional en la búsqueda de la estabilidad y la prosperidad del Congo.
La marcha de protesta y la presentación del memorando en la Embajada de Estados Unidos demuestran la determinación de los líderes tradicionales de hacer oír su voz y exigir acciones concretas para poner fin a la inseguridad que azota la región. Al resaltar la responsabilidad de Ruanda y sus aliados en los disturbios que sacuden el este de la República Democrática del Congo, advierten contra la balcanización y los intentos de desestabilizar el país.
Esta movilización histórica de los líderes consuetudinarios congoleños es un llamado a la solidaridad nacional, la defensa de la integridad territorial y la preservación de la soberanía del país. Recuerda a la comunidad internacional sus deberes para con un Congo marcado por décadas de conflicto y violencia. Las autoridades tradicionales y consuetudinarias encarnan la voz del pueblo congoleño, decidido a construir un futuro de paz y dignidad para las generaciones futuras.