La dinámica de la relación romántica entre una mujer mayor y un hombre más joven parece ser un tema recurrente en el mundo del cine últimamente. Después de la película “La idea de ti”, ahora le toca el turno a “Un asunto de familia” de tratar este tema que casi podría titularse “La idea de que mi jefe actor tenga una relación con mi madre”. «. Si bien el dúo Nicole Kidman-Zac Efron promete despertar la curiosidad del público, los clichés trillados de esta comedia romántica (y sólo ocasional) no logran generar mucha chispa.
Uno de los problemas de la película es que la perspectiva está muy inclinada hacia el personaje de Zara, la hija de Kidman, interpretada por Joey King, quien trabaja como asistente del actor Chris Cole, interpretado por Efron, mejor conocido por su papel de superhéroe llamado Ícaro Rush. Para gran frustración de Zara, él es propenso a excesos estereotipados, encargándole tareas triviales como comprar su aislado de proteína de suero. Zara ha visto a Chris usar y descartar mujeres, amenazando con renunciar casi tan a menudo como menciona la posibilidad de despedirla. Su última discusión lo lleva a la casa que ella comparte con su madre, Brooke, una autora de bestsellers y viuda.
Después de algunos momentos incómodos, Chris y Brooke terminan juntos en la cama, lo que la deja, como ella dice, «comenzando a sentir emociones nuevamente». Zara está comprensiblemente horrorizada ante la idea de que los dos se junten, lo que llevó a su madre a mencionar que su diferencia de edad es de solo 16 años, no 20 (que se acerca más a la realidad, pero como sea), reduciéndolos a una simple diferencia de calendario. .
Dirigida por Richard Lagravenese – cuyo crédito más relevante aquí podría ser la adaptación del guión de «On the Road to Madison» – «A Family Affair» sufre del narcisismo generalizado de todos los involucrados, lo que hace que la noción del amor verdadero sea difícil de aceptar. Desafortunadamente, la directora y guionista Carrie Solomon intenta crear un romance convincente, que incluye una escena de cena con la abuela de Zara (Kathy Bates, una vez más subempleada) que trabaja para humanizar a Chris en el… más allá de su físico escultural.
Si bien hay algunas líneas divertidas aquí y allá (cuando Brooke dice que es australiana, Chris le pregunta si conoce a Margot Robbie), la comedia se agota en gran medida más allá de las presentaciones iniciales, y el romance, después de este primer encuentro, no es tan convincente. como podría ser.
Esto deja espacio para algo de carisma por parte de las estrellas, pero no suficiente química para impulsar la película hacia el éxito, trayendo consigo los típicos clichés de Hollywood y numerosos montajes musicales, aparentemente para llenar el tiempo de ejecución de la película..
Ciertamente, «A Family Affair» probablemente fue un éxito para Netflix tan pronto como Kidman y Efron firmaron sus acuerdos, al menos en términos del algoritmo y los números de visualización que generará su pareja.
Aunque las expectativas son modestas, la película no las cumple del todo: un ejemplo más, en el ámbito de la comedia romántica, donde la idea de estos dos actores principales parece mejor que su ejecución.
“A Family Affair” está disponible exclusivamente en Netflix a partir del 28 de junio y tiene una clasificación PG-13.