**Fatshimetria**
En los últimos días, la ciudad de Lubumbashi se enfrenta a un aumento de la delincuencia urbana, lo que genera preocupación entre la población. Los informes del grupo temático de gobernanza, paz y seguridad del marco de consulta de la sociedad civil de Haut-Katanga destacan una serie de actos criminales, que van desde secuestros hasta robos.
El coordinador de esta estructura, Bertin Tshoz, hace sonar la alarma ante esta ola de criminalidad que traumatiza a los habitantes de la región. Las historias de jóvenes armados con machetes que entran en casas, roban propiedades, atacan, hieren o incluso violan a sus víctimas crean un clima de miedo e inseguridad. Barrios como Golf Maisha, Kawama, Kassapa, Mumbunda, Zambia y Luwowoshi se presentan como los más afectados, con recurrentes escenas de violencia.
La situación es particularmente crítica en determinadas zonas específicas de la ciudad, en particular la avenida Mobutu, la esquina Kamanyola, la calle Katuba cerca del puente y la carretera circular. Los delincuentes juveniles que viven en las calles proliferan, atacan a los transeúntes, les roban sus pertenencias e incluso los arrojan al agua en algunos casos extremos. Las vías también son identificadas como zonas de riesgo, donde los bandidos no dudan en atacar a los ciudadanos, maltratándolos para robarles sus bienes.
Bertin Tshoz pide a las autoridades locales que adopten medidas urgentes para restablecer la seguridad y la tranquilidad de los habitantes de Lubumbashi. Se necesitan intervenciones rápidas y eficaces por parte de las fuerzas del orden para poner fin a esta espiral de violencia que está arruinando la vida cotidiana de los ciudadanos.
En conclusión, es imperativo que se implementen acciones concretas para combatir la delincuencia urbana en Lubumbashi, garantizando así la protección de las poblaciones y el restablecimiento de un clima de seguridad en la ciudad. El compromiso de las autoridades, el refuerzo de las patrullas policiales y la sensibilización pública son medidas esenciales para frenar este flagelo y garantizar un entorno pacífico para todos los ciudadanos de Lubumbashi.