**Goma, Kivu del Norte: la inseguridad debida a los robos abunda en el distrito de Ndosho**
En la comunidad de Ndosho en Goma, una sombra siniestra se cierne sobre la tranquilidad de los habitantes. Las historias de robos están aumentando, mientras que la inseguridad se está volviendo algo común. Ante este duro clima, el consejo juvenil local del municipio da la voz de alarma: es urgente actuar.
Con el paso de las semanas, la situación de seguridad se ha deteriorado, como lo demuestran las alarmantes cifras. En cinco días se registraron nada menos que 11 casos de robo, lo que sumió a las familias en una profunda angustia. Los hogares ya debilitados fueron el blanco de ladrones sin escrúpulos, que se llevaron bienes materiales y tranquilidad.
Ante esta espiral de violencia, la población se siente abandonada. Se lanzaron llamadas de auxilio y las autoridades hicieron caso omiso de las repetidas alertas. La inacción de los servicios de seguridad refuerza el sentimiento de impotencia que embarga a la comunidad de Ndosho.
El último episodio tuvo lugar la noche del 9 al 10 de julio, en la avenida Léon Songa. Los ladrones arrasaron impunemente, robaron descaradamente un orfanato y saquearon todo lo que encontraron a su paso. A pesar de los gritos de angustia de los residentes, no se proporcionó ayuda, dejando a la población a su suerte.
El llamamiento lanzado por el secretario técnico del consejo juvenil local resuena como un grito del corazón: es hora de actuar, de encontrar soluciones concretas para poner fin a esta ola de inseguridad. Los habitantes de Ndosho merecen vivir en paz, encontrar la tranquilidad que les corresponde.
Es imperativo que las autoridades hagan un balance de la situación y adopten medidas efectivas para proteger a los ciudadanos. La seguridad es un derecho fundamental y es deber de los poderes públicos garantizar la seguridad de todos.
En esta época oscura, cuando la sombra del crimen se cierne sobre Ndosho, la unidad y la solidaridad de la comunidad serán armas esenciales para enfrentar la inseguridad. Porque es juntos, de la mano, que los vecinos podrán devolverle a su barrio la dulzura de vida que se merece.
*Fatshimetrie permanece atenta a esta situación, dispuesta a transmitir las voces de quienes piden ayuda y a dar testimonio de las injusticias que afectan a nuestra sociedad.*
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En este texto busqué resaltar el aspecto humano de la situación, enfatizando las emociones y las repercusiones de los actos de violencia en la comunidad Ndosho. También subrayé la importancia de la solidaridad y la acción colectiva para combatir la inseguridad.