Fatshimetria –
El corazón de la nación africana se ha visto sacudido por una tragedia inesperada: veintiuna personas perdieron la vida en el derrumbe de un edificio escolar en el centro de Nigeria. El accidente, calificado de «tragedia evitable» por las autoridades locales, afectó profundamente a la ciudad de Jos, capital del estado de Plateau, y dejó a otras treinta personas hospitalizadas, según la Agencia Nacional de Gestión de Emergencias de Nigeria (NOT MY).
El edificio de dos pisos se derrumbó mientras los estudiantes realizaban un examen, dejando a casi 120 personas atrapadas bajo los escombros, según el gobierno del estado de Plateau. El gobernador, Caleb Manasseh Mutfwang, expresó su más sentido pésame a las familias de los estudiantes y al personal de la escuela St. Academy, destacando la frágil estructura de la institución y su peligrosa ubicación cerca de un río.
Las autoridades locales han subrayado que las escuelas con problemas de seguridad similares deben cerrar sus puertas, mientras que el gobierno ha pedido a los hospitales de la región que proporcionen atención médica sin trámites burocráticos ni pagos.
Desafortunadamente, el colapso de edificios es una situación común en Nigeria, debido a estándares de construcción laxos y materiales de mala calidad. Esta tragedia resalta la necesidad urgente de fortalecer las regulaciones de construcción y garantizar que las instalaciones educativas brinden un entorno seguro para los estudiantes.
En conclusión, esta terrible pérdida de vidas pone de relieve la importancia crucial de invertir en infraestructura sólida y segura para garantizar la protección de todos. Esta tragedia debería servir como un recordatorio conmovedor de la necesidad de actuar de manera decisiva y preventiva para evitar desastres similares en el futuro.