El Sindicato Nacional de Inspectores del Congo (SYNIC) emitió recientemente importantes recomendaciones dirigidas a la atención del Ministro Nacional de Educación Nacional y Nueva Ciudadanía. Estas recomendaciones, resultantes de la conferencia de Bibwa, tienen como objetivo garantizar la equidad salarial dentro de la EPST en la provincia de Kwilu.
Durante una reunión celebrada en Kikwit, los inspectores insistieron en la necesidad de garantizar un salario mínimo de 500 dólares a los alguaciles, el grado más bajo en la jerarquía de la EPST. Esta solicitud tiene como objetivo reconocer y promover el trabajo de estos agentes esenciales para el buen funcionamiento del sistema educativo congoleño.
Además, el sindicato pidió al Ministro que tomara medidas para facilitar la jubilación de los docentes e inspectores elegibles. Esta iniciativa no sólo rejuvenecería la fuerza laboral de la EPST, sino que también ofrecería nuevas oportunidades laborales a jóvenes graduados que buscan estabilidad profesional.
Rodolphe Maboko, secretario provincial de SYNIC Kwilu 2, destacó la importancia de implementar las resoluciones de Bibwa para garantizar una progresión salarial justa y equitativa para todos los agentes de la EPST. También destacó la urgencia de acelerar el proceso de jubilación de los inspectores al final de su carrera, con el fin de promover el relevo generacional dentro del sector educativo.
En caso de incumplimiento de los acuerdos de Bibwa, el sindicato advirtió al gobierno sobre los riesgos potenciales de que docentes e inspectores desencadenaran huelgas. Esta presión sindical tiene como objetivo garantizar el cumplimiento de los compromisos adquiridos durante las reuniones de Bibwa y promover condiciones laborales dignas para todos los actores del sector educativo en la República Democrática del Congo.
En conclusión, las recomendaciones emitidas por SYNIC reflejan el deseo de los inspectores de la EPST de que las autoridades competentes tengan en cuenta sus legítimas demandas. Es esencial que estas demandas sean escuchadas e implementadas para garantizar un sistema educativo de calidad, respetuoso de los derechos y necesidades de los trabajadores de la educación en la República Democrática del Congo.