El gobierno acaba de tomar medidas estrictas para regular los lugares de culto y las asociaciones sin fines de lucro. Según un comunicado del Ministro de Estado y Ministro de Justicia, ninguna iglesia podrá instalarse en un radio de 500 metros entre sí. Además, para ejercer como pastor será imprescindible obtener un permiso de culto expedido por el Ministerio de Justicia.
Estas decisiones siguen las resoluciones adoptadas durante el trabajo de la Comisión multisectorial sobre Religiones y Asociaciones, que se reunió recientemente. La misión de esta comisión era sanear, regular y estructurar el marco operativo de las asociaciones sin fines de lucro. Estas medidas tienen como objetivo establecer una mejor gobernanza y armonizar el panorama religioso.
Así, cualquier solicitud de reconocimiento legal de una asociación estará sujeta al examen de las condiciones previstas por la legislación vigente. En particular, se pedirá a las asociaciones que presenten un informe sobre la investigación de viabilidad de sus sedes y de sus actividades. Además, las asociaciones sin fines de lucro que previamente hubieran obtenido un número de Folio 92 están obligadas a cumplir con la ley obteniendo su personalidad jurídica en el plazo de tres meses.
Además, el comunicado de prensa especifica los criterios para pertenecer a una asociación religiosa. Sólo podrán reconocerse como tales las iglesias, comunidades, ministerios, asambleas autónomas, centros de evangelización o grupos de oración regularmente constituidos y dotados de personalidad jurídica. Además, todo representante legal, fundador o ministro de religión debe estar identificado y obtener un permiso para ejercer la religión.
Por último, estas nuevas directivas exigen la presencia de dos delegados del Ministerio de Justicia durante cualquier asamblea general de una asociación sin fines de lucro. Además, está claramente estipulado que ningún servicio municipal, en particular el servicio DECO, podrá invadir las prerrogativas del Ministerio de Justicia.
Estas medidas, aunque estrictas, tienen como objetivo establecer una mayor transparencia y una regulación más estricta de las actividades de los lugares de culto y de las asociaciones sin fines de lucro. Queda por ver cómo se aplicarán estas nuevas normas sobre el terreno y qué impacto tendrán en la vida asociativa y religiosa del país.