**Fatshimetrie: Higienización de lugares de culto en la República Democrática del Congo**
En la República Democrática del Congo, la cuestión de la proliferación de lugares de culto se ha vuelto preocupante, particularmente en la capital, Kinshasa. La alta densidad de iglesias, a veces hasta cinco en una sola avenida, ha provocado reacciones y medidas por parte de las autoridades.
El arzobispo presidente de la Iglesia del Despertar del Congo (ERC), Ejiba Yamapia Evariste, aclaró recientemente la prohibición de establecer más de una iglesia en un radio de 500 metros. Esta iniciativa, resultante de una circular del Ministerio de Justicia destinada a regular y estructurar los lugares de culto, tiene como objetivo limpiar el entorno religioso y garantizar condiciones óptimas para los fieles.
Es importante destacar que esta medida sólo se refiere a nuevas instalaciones de iglesias. Las iglesias existentes no se ven afectadas por este reglamento. Se creará una comisión de viabilidad para verificar el cumplimiento de esta disposición en futuros edificios religiosos. Este enfoque pragmático apunta a conciliar los imperativos regulatorios con el respeto a las libertades religiosas y al patrimonio eclesial existente.
El ministro de Justicia, Constant Mutamba, también ha adoptado otras medidas para regular el funcionamiento de las asociaciones sin ánimo de lucro (ASBL) y de las asociaciones religiosas. Extendió el plazo para la obtención de personalidad jurídica para las organizaciones sin fines de lucro y exigió la identificación de los representantes legales de las asociaciones religiosas.
En un contexto donde la diversidad religiosa es una realidad social en la República Democrática del Congo, es imperativo garantizar que cada lugar de culto pueda practicarse respetando la ley y las normas establecidas. La gobernanza de los lugares de culto, la gestión de la contaminación acústica y el respeto del medio ambiente urbano son cuestiones importantes para garantizar la convivencia pacífica de las diferentes confesiones religiosas.
En conclusión, el objetivo de estas medidas regulatorias es promover un clima de tolerancia y respeto mutuo entre las diferentes comunidades religiosas de la República Democrática del Congo. Así, al garantizar la organización y estructuración de los lugares de culto, las autoridades contribuyen a fortalecer la convivencia y la libertad de culto en un marco armonioso y seguro.