Fatshimetrie, 22 de julio de 2024 – La economía de la República Democrática del Congo sigue siendo el centro de atención con el reciente anuncio de una caída de la tasa de inflación semanal. De hecho, según los últimos datos publicados por el Banco Central del Congo (BCC), la tasa de inflación semanal se situó en el 0,15% en la tercera semana de julio, lo que supone un descenso respecto a la semana anterior, cuando era del 0,31%.
Esta caída, observada por segunda semana consecutiva, refleja la estabilización de los precios en el mercado local, atribuible en parte a la relativa estabilidad del mercado cambiario y a la tendencia a la baja de los precios de los productos agrícolas a escala global. Estos elementos contribuyeron a frenar la formación de precios en el país.
Las distintas funciones del consumo también influyeron en la evolución de la inflación semanal. Los productos alimenticios y bebidas no alcohólicas fueron los principales contribuyentes con el 68,24% del índice general, seguidos por bienes y servicios varios, restaurantes y hoteles, muebles y artículos para el hogar, y el sector salud.
Interanualmente, la tasa de inflación se sitúa en el 15,26%, por debajo de semanas anteriores, mientras que anualizada es del 15,40%, superando la meta anual fijada en el 11,3%. Estas cifras muestran la importancia de los esfuerzos realizados por el gobierno de Suminwa para estabilizar el tipo de cambio y garantizar la estabilidad de los precios en el mercado, con el fin de mejorar el poder adquisitivo de los hogares congoleños.
Cabe señalar que, desde su toma de posesión, el gobierno se comprometió a detener la hemorragia de salidas de fondos mediante un procedimiento de emergencia que contribuyó a la depreciación de la moneda local frente al dólar estadounidense. Esta acción, combinada con otras medidas, permitió limitar el impacto de las fluctuaciones monetarias en la economía nacional.
En conclusión, la situación económica en la República Democrática del Congo está evolucionando con notables fluctuaciones en la tasa de inflación, pero los esfuerzos realizados por las autoridades apuntan a mantener la estabilidad de precios y mejorar las condiciones de vida de la población. La vigilancia y la implementación de políticas económicas apropiadas siguen siendo esenciales para garantizar un desarrollo económico sostenible e inclusivo en el país.