Revolución agrícola en Kenia: hacia prácticas sostenibles para preservar la fertilidad del suelo

En el mundo de la agricultura en Kenia, soplan vientos de cambio sobre las prácticas tradicionales de los agricultores. Con una creciente conciencia sobre la degradación de los suelos acidificados, cada vez más productores están abandonando los métodos agrícolas industriales para adoptar enfoques más sostenibles y respetuosos con el medio ambiente.

La transformación de las prácticas agrícolas queda ilustrada por la historia de Benson Wanjala, un agricultor que decidió cambiar su forma de cultivar para preservar la fertilidad de su tierra. En el pasado, Wanjala cultivaba una gran parcela de tierra en su pueblo natal y cosechaba 200 sacos de maíz por temporada. Sin embargo, con el paso de los años, los rendimientos han disminuido significativamente a sólo 30 bolsas. Atribuye este descenso al uso de fertilizantes acidificantes, que han agotado sus tierras hasta el punto de volverlas infértiles.

Ante esta realidad, Wanjala tomó la decisión de dedicarse al cultivo de hortalizas en su pequeño terreno en Nairobi. Sin embargo, también en este caso ha observado una disminución de los rendimientos, que atribuye al uso excesivo de fertilizantes químicos. Esta práctica común entre muchos pequeños agricultores contribuye a la degradación de la calidad del suelo y a una caída de la productividad. A pesar de ello, Wanjala sigue decidida a mantener a su familia a través de la agricultura.

Para combatir esta tendencia a la acidificación del suelo, expertos como Priscilla Wakarera enfatizan la importancia de las prácticas agrícolas sostenibles y los análisis periódicos del suelo. De hecho, el uso excesivo de fertilizantes químicos puede comprometer la salud del suelo y provocar una reducción de los rendimientos a largo plazo. Es por ello que la promoción de la agricultura regenerativa, basada en alternativas más sostenibles como los biofertilizantes, el mulching o el compostaje, parece ser una solución viable para restaurar la fertilidad del suelo.

Elizabeth Atieno Opolo, experta en cultivos y activista de seguridad alimentaria de Greenpeace África, advierte sobre los efectos nocivos del uso excesivo de fertilizantes sintéticos. Alienta a los agricultores a adoptar prácticas agrícolas sostenibles, como la rotación de cultivos y la agrosilvicultura, para preservar la salud del suelo a largo plazo. A pesar de los desafíos que enfrenta, enfatiza que la agricultura sostenible ofrece beneficios a largo plazo que superan con creces las soluciones agrícolas convencionales.

En un contexto donde la degradación del suelo y la acidificación de la tierra amenazan la seguridad alimentaria de las comunidades rurales, es imperativo repensar nuestras prácticas agrícolas para garantizar un futuro sostenible para las generaciones futuras.. Al promover enfoques respetuosos con el medio ambiente y promover la salud del suelo, los agricultores kenianos no sólo pueden mejorar sus rendimientos, sino también contribuir a la preservación de la biodiversidad y la lucha contra el cambio climático.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *