Fatshimetrie, 11 de agosto de 2024 – Un reciente anuncio de la archidiócesis de Kinshasa en la República Democrática del Congo conmocionó a la comunidad católica local. Dos sacerdotes, los abades Symphorien Mutombo Ilunga y Albert-Marius Mukendi Mutombo, fueron declarados perdidos de su estatus clerical tras decretos de la Santa Sede.
Esta decisión, notificada a los interesados hace más de un año, significa que los dos sacerdotes ya no pueden ejercer las funciones vinculadas al ministerio sacerdotal ni vestir el hábito eclesiástico. Un comunicado de prensa firmado por el padre Clet-Clay Mamvemba, secretario-canciller de la archidiócesis, confirmó esta noticia que tomó por sorpresa a muchos fieles.
En una declaración dirigida a los miembros del Cenco, a los sacerdotes, a los consagrados y a las consagradas, así como a los fieles laicos de la archidiócesis de Kinshasa, el cardenal Fridolin Ambongo Besungu pidió al pueblo de Dios que apoye a los dos sacerdotes en sus nuevas situaciones. Destacó la importancia de la oración para guiarlos hacia una vida coherente con estos cambios inesperados.
Esta decisión tomada por la Santa Sede plantea interrogantes dentro de la comunidad católica, destacando la importancia de la integridad y la responsabilidad de los representantes de la Iglesia. Los fieles están llamados a reaccionar con comprensión y apoyo en estos momentos delicados.
Este anuncio resalta la necesidad de que la Iglesia tome medidas estrictas en casos de mala conducta o actos poco éticos por parte de sus miembros clericales. También destaca la importancia de la transparencia y la rendición de cuentas dentro de la jerarquía eclesiástica.
En estos tiempos de cuestionamiento y reforma dentro de la Iglesia, es esencial permanecer vigilantes y unidos para preservar la integridad y credibilidad de la institución.