**Fatshimetrie: Las alarmantes cifras de violaciones de derechos humanos en la República Democrática del Congo**
La Oficina Conjunta de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (UNJHRO) publicó recientemente un informe detallado sobre las violaciones de derechos humanos en la República Democrática del Congo durante el primer semestre de 2024. Los datos recopilados son a la vez inquietantes y reveladores de la crítica situación en la que se encuentra el país. sí mismo.
Durante el período comprendido entre el 1 de enero y el 30 de junio de 2024, la ONUJHRO registró un total de 2.355 violaciones y abusos de derechos humanos, que involucraron a 6.309 víctimas. Estas cifras, aunque representan una caída del 8% respecto al año anterior, siguen siendo preocupantes. De hecho, el número de víctimas aumentó un 15%, lo que pone de relieve la persistencia de la violencia y los abusos perpetrados contra poblaciones vulnerables.
La región más afectada por estas violaciones sigue siendo Petit-Nord, donde se cometieron 682 actos reprobables, principalmente por grupos armados. Destaca especialmente el M23 con el 31,09% de los ataques registrados en esta zona. En el Extremo Norte, las ADF y los Mayi-Mayi también son responsables de un número importante de violaciones, lo que ilustra la diversidad de actores involucrados en estos actos atroces.
La provincia de Ituri, a pesar de los acuerdos de alto el fuego, no ha escapado a la violencia. CODECO y las ADF aparecen a la cabeza de la lista de grupos armados responsables de abusos, mientras que los agentes estatales también son señalados por el 12,97% de las violaciones registradas.
En Kivu del Sur y Tanganica, la situación es igualmente preocupante: los grupos armados son responsables del 51% y el 40,8% de las violaciones, respectivamente. Estas cifras son testigos de una trágica realidad en la que actores sin escrúpulos toman como rehenes a la población civil.
Esta sombría realidad pone de relieve la extrema necesidad de una acción concertada para poner fin a estas violaciones de derechos humanos en la República Democrática del Congo. Las autoridades nacionales e internacionales deben redoblar sus esfuerzos para prevenir nuevas atrocidades y proteger a las poblaciones vulnerables.
En conclusión, la situación actual en la República Democrática del Congo es alarmante, pero no desesperada. Es más esencial que nunca que actuemos juntos para poner fin a esta violencia inaceptable y trabajar por una paz duradera y el respeto incondicional de los derechos humanos.
Por **Fatshimetrie**