**Operación para expulsar a niños excombatientes de Kivu del Sur: un rayo de esperanza para estos jóvenes supervivientes de la guerra**
La semana pasada se llevó a cabo una operación a gran escala en las localidades de Katanga Lwemba y Kalundja, situadas en el territorio de Fizi, en Kivu del Sur. Esta misión, orquestada por un equipo mixto del Programa de Desarme, Desmovilización y Reintegración Comunitaria (PDDRC-S), permitió el retiro de 96 niños menores de edad de grupos armados activos en la región. Un paso crucial en la lucha contra el reclutamiento de jóvenes en las milicias armadas que están desgarrando la región.
Estos niños, la mayoría de los cuales fueron reclutados por la fuerza, fueron retirados de los grupos armados Biloze Bishambuke (FABB) y Mai Mai Toronto (FMMT). Entre ellos, 27 son niñas, lo que demuestra la vulnerabilidad de los jóvenes frente a reclutadores sin escrúpulos. A través de esfuerzos de divulgación y persuasión, los líderes de estas milicias finalmente acordaron liberar a estos jóvenes cautivos, brindando un rayo de esperanza para su reintegración a la sociedad.
Actualmente alojados en familias de acogida transitorias, estos niños se benefician de apoyo psicológico y material para ayudarles a reconstruirse después de años pasados en un contexto de violencia y caos. La Asociación Juvenil de Kalundu para el Desarrollo y la Integración de la Juventud (AJEDI-KA) participa activamente en este proceso de reintegración, con el objetivo de ofrecer a los niños una segunda oportunidad en la vida.
Es crucial enfatizar que esta operación es sólo un primer paso. De hecho, todavía se espera que otros 104 niños sean retirados de los grupos armados de la región, lo que pone de relieve la magnitud del desafío que enfrenta la comunidad internacional a la hora de proteger los derechos de los niños en zonas de conflicto. El Programa de Desarme, Desmovilización y Reintegración Comunitaria (PDDRC-S) continúa su acción sensibilizando a las poblaciones locales sobre los peligros de alistar a niños en grupos armados, fortaleciendo así la prevención de este flagelo.
Además, una delegación del PDDRC-S, acompañada de sus socios, continúa su acción de sensibilización en la jefatura de Bafuliro, en territorio de Uvira. Esta estrategia de sensibilización tiene como objetivo frenar el reclutamiento de jóvenes en milicias armadas, destacando las trágicas consecuencias de esta práctica en las vidas de los niños y sus comunidades.
En resumen, esta operación para expulsar a los niños excombatientes de Kivu del Sur representa un paso significativo hacia la protección de los derechos de los niños, su reintegración social y la prevención de su explotación por parte de grupos armados. Un rayo de esperanza brilla en la oscuridad de la guerra, dando testimonio de la resiliencia y la voluntad de estos niños de reconstruir su futuro con dignidad y seguridad.