Fatshimetrie, 25 de agosto de 2024 – Recientemente se lanzó una loable iniciativa en la parroquia del Sacré Cœur de la Gombe, en el norte de Kinshasa, para apoyar a los niños que padecen anemia falciforme, una grave enfermedad genética también conocida como anemia falciforme. El proyecto denominado “Vivir con Amor” tiene como objetivo recaudar fondos para estos jóvenes pacientes, cuya condición requiere cuidados constantes y un seguimiento médico riguroso.
Al origen de esta iniciativa, Eve Wady, fundadora del colectivo «Eva Marie et Cie», explica que la anemia falciforme es una enfermedad que afecta a muchos niños en la República Democrática del Congo. De hecho, según alarmantes estadísticas del año 2021, se produjeron más de 34 muertes relacionadas con esta enfermedad, lo que convierte a la anemia falciforme en una de las principales causas de mortalidad infantil en el país.
Las cifras son sorprendentes: entre 100 y 2.000 niños nacen con anemia falciforme por cada 100.000 nacimientos en la República Democrática del Congo, con una tasa de mortalidad particularmente alta entre los niños menores de 5 años. La prevalencia de la enfermedad en la población general alcanza entre el 17,9% y el 40%, lo que pone de relieve la magnitud del desafío que enfrentan los pacientes y quienes los rodean.
En este contexto, el colectivo «Eva Marie et Cie» se compromete desde hace 10 años a movilizar recursos para luchar contra la anemia falciforme, en colaboración con organizaciones como la ONG «Reso drépanocytose SS» y «Kazadi Asbl». Bajo la coordinación del Sr. Cédrick Katembe, el Trésor Alexandre Mbuyi y el Padre Gustave Lobunda, esta estructura trabaja incansablemente para apoyar a los niños enfermos y sensibilizar a la población sobre la importancia de la detección precoz de la enfermedad.
Es urgente tomar medidas concretas para abordar este importante problema de salud pública, promoviendo el acceso a la atención y fortaleciendo las políticas de sensibilización y prevención. La solidaridad y el compromiso de todos son esenciales para garantizar un futuro mejor a los niños afectados por la anemia falciforme y construir una sociedad más inclusiva y solidaria.
Movilicémonos juntos para apoyar a estos niños en su lucha contra la enfermedad y ofrecerles la esperanza de una vida mejor, llena de amor y solidaridad. Porque uniendo fuerzas podremos revertir la anemia falciforme y ofrecer a estos jóvenes pacientes la oportunidad de crecer y prosperar en un entorno más equitativo y solidario.