**Auditor general Tsakani Maluleke: un llamado urgente a la buena gobernanza en los municipios sudafricanos**
Una vez más, el escenario sudafricano es escenario de un apasionado alegato por una gestión transparente de los recursos públicos. Tsakani Maluleke, Auditor General, instó recientemente a los gobiernos locales a no despilfarrar el dinero de los contribuyentes, al presentar los resultados de las auditorías municipales para el año 2022-2023. El hallazgo es alarmante: sólo el 13% de los municipios obtuvieron auditorías impecables.
De los 257 municipios del país, sólo 34 destacan por su gobernanza ejemplar. Esta cifra deja a uno perplejo en cuanto al estándar aceptado de transparencia y rendición de cuentas en nuestras instituciones locales. Los contribuyentes, por su parte, parecen haberse vuelto insensibles a la idea de que su dinero público se desperdicie o se utilice indebidamente.
Tsakani Maluleke subraya que una gran parte de los municipios no respetan la legislación, lo que constituye un obstáculo importante para una buena gestión. Los hallazgos de incumplimiento ascienden al 86%, un ligero aumento en comparación con años anteriores. La demanda de Maluleke, sin embargo, no es nueva: es parte de una larga serie de llamados a una mejor gobernanza por parte de sus predecesores y otras figuras de autoridad.
La observación es dolorosa: los escándalos de corrupción salpican periódicamente los medios de comunicación y muchos casos esperan una resolución legal. Pero desmantelar las redes de clientelismo municipal necesarias para avanzar hacia una gobernanza ejemplar requiere que nuestros políticos y servidores públicos demuestren valentía e integridad.
La virtud de un liderazgo ejemplar comienza en la cima de cualquier organización o gobierno y se extiende como un bálsamo curativo por todos los estratos administrativos. No es el resultado de simples declaraciones o sofisticadas estrategias de comunicación, sino del ejemplo de nuestros líderes y su determinación de luchar contra la corrupción.
Las expectativas públicas son altas y la demanda de transparencia y rendición de cuentas nunca ha sido más apremiante. Mientras Tsakani Maluleke llama a la acción, es imperativo que los gobiernos locales respondan con medidas concretas y compromisos firmes para la gestión responsable de los fondos públicos.
En última instancia, la buena gobernanza no es una opción, sino una necesidad vital para garantizar un futuro próspero y equitativo para todos los ciudadanos sudafricanos. Es hora de poner las palabras en acción y sentar las bases sólidas de una democracia transparente e inclusiva.