Fatshimetrie, 7 de septiembre de 2024. – La cuestión de la sensibilización sobre la anemia falciforme entre los niños con anemia falciforme en Mbuji-Mayi, Kasai-Oriental, en la República Democrática del Congo, es de crucial importancia. De hecho, durante una reciente reunión de sensibilización, en presencia del médico director de la clínica pediátrica de la ciudad, Benoît Mbiya, se destacó cuán esencial era la prevención de las convulsiones en estos niños, en particular en lo que respecta al consumo regular de agua en las escuelas.
El médico destacó los riesgos que enfrentan los niños con anemia falciforme, particularmente cuando van a la escuela bajo un sol abrasador, lo que puede provocar deshidratación y desencadenar convulsiones. También destacó la importancia de que estos niños no permanezcan sentados durante largas horas sin beber suficiente agua, lo que también podría desencadenar convulsiones.
Para mitigar estos riesgos, Benoît Mbiya sugirió la idea de proporcionar botellas de agua a los niños con anemia falciforme para acompañarlos a la escuela, al tiempo que destacó la necesidad de educar a los niños sobre la importancia de beber agua con regularidad. Además, animó a los padres a comunicarse con los maestros para informarles sobre cómo deben cuidar a los niños con anemia falciforme.
Además, la sensibilización de los niños con anemia falciforme no se limita únicamente al consumo de agua en las escuelas. De hecho, durante el encuentro de escucha colectiva organizado por la estructura DREPACCI, los niños también fueron informados sobre las actitudes a adoptar en el entorno escolar para evitar crisis. Esta iniciativa tiene como objetivo dotar a los niños anémicos de conocimientos y buenas prácticas para gestionar su enfermedad de forma óptima.
Por último, el proyecto DREPACCI, que opera en África Central y Costa de Marfil, está plenamente comprometido con el apoyo a las personas anémicas, en particular a las que padecen anemia falciforme. A través de acciones comunitarias como visitas domiciliarias y sesiones de escucha colectiva, el proyecto pretende mejorar la gestión de esta enfermedad y concienciar a la población sobre buenas prácticas a adoptar.
En conclusión, concienciar a los niños con anemia falciforme sobre el consumo de agua en las escuelas es una cuestión importante para prevenir crisis y mejorar su calidad de vida. Es esencial que continúen los esfuerzos para apoyar a estos niños y sus familias en el manejo diario de la anemia falciforme, para ofrecerles un futuro más saludable y pleno.