Las recientes y devastadoras inundaciones que azotaron el estado de Borno (Nigeria) dejaron a su paso desolación y destrucción, dejando tras de sí un alto costo en vidas humanas y pérdidas de propiedades. Ante esta tragedia, el Presidente Bola Tinubu aseguró al pueblo y al gobierno de Borno el apoyo inquebrantable del Gobierno Federal.
Durante su visita a Maiduguri, el Presidente Tinubu, acompañado por el Gobernador Babagana Zulum, expresó su profunda tristeza por la devastación causada por las inundaciones. Las cifras son alarmantes: 37 vidas perdidas, un millón de personas desplazadas y propiedades por valor de millones de naira destruidas. Estas cifras, aunque desgarradoras, sólo reflejan la verdadera magnitud del desastre.
En un gesto de solidaridad y compasión, el presidente Tinubu se comprometió a brindar asistencia concreta al estado de Borno para la rehabilitación de las zonas afectadas y el rescate de las víctimas. Elogió el compromiso del gobernador Zulum en el manejo de los desafíos planteados por las inundaciones y destacó que esta calamidad era un problema nacional, llamando a la solidaridad colectiva para superar esta crisis.
El Shehu de Borno, Alhaji Abubakar Ibn El-Kanemi, expresó su agradecimiento al presidente por su visita y pidió una investigación exhaustiva para identificar las causas profundas de las inundaciones, con el fin de prevenir futuros desastres. Señaló que la ciudad de Maiduguri no había experimentado una tragedia de este tipo desde su fundación en 1907, lo que convierte este desastre en un evento sin precedentes en la historia reciente de la región.
El Gobernador Zulum también expresó su agradecimiento al Presidente por su visita y apoyo, destacando el impacto devastador de las inundaciones en la vida cotidiana de la población de Maiduguri. Elogió la compasión y la humanidad del presidente Tinubu y destacó que su presencia demostraba una verdadera solidaridad con el pueblo nigeriano en estos tiempos difíciles.
La visita del presidente Tinubu a Borno fue un testimonio conmovedor de compasión y apoyo hacia una población gravemente afectada por los elementos desatados de la naturaleza. Subraya la importancia de la unidad y la solidaridad nacionales frente a los desafíos que enfrentan las comunidades locales y nos recuerda que juntos podemos superar los desafíos que se interponen en nuestro camino.
En última instancia, la respuesta humanitaria y el apoyo brindado por el gobierno federal y las autoridades locales serán esenciales para permitir que Borno se recupere de este desastre, reconstruya y sane sus heridas. Esperemos que esta terrible experiencia fortalezca la resiliencia y la solidaridad de la comunidad frente a los desafíos futuros.