La Avenida de la Liberación, antiguamente conocida como 24 de Noviembre, es una de las principales arterias de la ciudad de Kinshasa y conecta varios municipios como Bandalungwa, Bumbu, Selembao y Ngiri-Ngiri. Sin embargo, su tramo desde el Puente Pequeño hasta la prisión central de Makala se encuentra hoy en un avanzado estado de deterioro, lo que crea importantes dificultades para los residentes y usuarios de esta vía crucial.
Las obras de rehabilitación que comenzaron hace tres semanas se han interrumpido bruscamente, dando paso a una calzada sembrada de escombros abandonados, canalones obstruidos con basura y baches enormes. Esta deplorable situación tiene un impacto directo en el tráfico, provocando atascos caóticos y obligando a los transportistas a incrementar los precios de sus viajes para compensar los retrasos y las molestias causadas por el pésimo estado de la carretera.
Los residentes de la región están expresando su frustración y preocupación por esta alarmante situación. Los atascos diarios y las difíciles condiciones del tráfico no sólo afectan su vida diaria, sino que también tienen repercusiones económicas negativas, ya que el aumento de los costos del transporte pesa mucho sobre los hogares que ya son vulnerables.
Es imperativo que las autoridades competentes adopten medidas inmediatas para reiniciar las obras de rehabilitación de este tramo de la Avenue de la Libération. La seguridad de los usuarios de las carreteras, la fluidez del tráfico y el bienestar de los residentes de la región deben ser las máximas prioridades.
También es fundamental garantizar que las fuerzas y cuerpos de seguridad responsables de garantizar la seguridad en esta ruta lo hagan respetando las normas y los derechos de los ciudadanos. Las denuncias de comportamiento violento por parte de determinados agentes de policía deben examinarse en profundidad para garantizar el respeto de las libertades y las normas individuales.
En resumen, la crítica situación en la Avenue de la Libération en Kinshasa exige una respuesta rápida y eficaz de las autoridades para restablecer unas condiciones de tráfico aceptables y garantizar la seguridad y el bienestar de la población local. No se puede seguir ignorando el estado ruinoso de esta carretera principal y deben adoptarse sin demora medidas concretas para remediar esta preocupante situación.