En un esfuerzo por garantizar la seguridad y el bienestar de los ciudadanos, se llevó a cabo una operación destinada a eliminar 26 barreras militares ilegales en el territorio de Beni en Kivu del Norte y en el de Mambasa en Ituri. Estos puestos de control, que se convirtieron en cabinas de peaje donde los conductores se veían obligados a pagar dinero cada vez que pasaban, han impactado durante mucho tiempo la vida de los habitantes de estas regiones.
Esta iniciativa, bien recibida por los vecinos, subraya la importancia de garantizar la libre circulación de personas y mercancías. De hecho, la presencia de estas barreras ilegales provocó no sólo perturbaciones en las carreteras, sino también prácticas de acoso y tortura infligidas a los usuarios por parte de determinados militares de servicio.
La acción para eliminar estas barreras se llevó a cabo bajo el liderazgo del general Bruno Mandevu, comandante del sector de operaciones Sokola 1, demostrando así un fuerte compromiso de las autoridades militares para luchar contra estas prácticas ilegales. Esta decisión surge tras numerosas denuncias de la sociedad civil y defensores de derechos humanos, destacando los abusos e injusticias sufridas por la población.
Rams Malikidogo, activista de derechos humanos en el territorio de Mambasa, celebró esta acción y destacó que las barreras, erigidas ilegalmente, constituyen un obstáculo para el desarrollo y la libertad de los residentes. Por lo tanto, esta eliminación ofrece una nueva vida a las comunidades locales, que ahora podrán moverse más libremente y vivir en un entorno libre de prácticas abusivas.
El coronel Mack Hazukay, portavoz de las operaciones militares de Sokola 1, invitó a la población a seguir denunciando cualquier caso de acoso o abuso perpetrado por militares, recordando así la importancia de la vigilancia ciudadana. Esta operación para eliminar barreras ilegales continuará en otras regiones donde también se denuncian prácticas de este tipo, lo que demuestra la voluntad de poner fin a estos abusos y garantizar una mayor seguridad para todos.
En última instancia, la lucha contra las barreras militares ilegales es parte de un enfoque global destinado a promover la justicia, la equidad y el respeto de los derechos fundamentales de las poblaciones. Esta acción demuestra el deseo de las autoridades de poner fin a las prácticas abusivas y promover un entorno propicio para el desarrollo y la paz social.