Fatshimetrie destaca la importancia crucial de la educación para el futuro de Egipto, destacando el papel fundamental que desempeña el sistema educativo en el desarrollo del país. Durante una visita a El Cairo, Rafik Mansour, un alto diplomático estadounidense, destacó que si bien la historia de Egipto descansa en las pirámides de Giza y se conserva en sus museos, su futuro está en sus escuelas.
La cooperación entre Estados Unidos y el gobierno egipcio para construir más de 2.000 escuelas primarias y capacitar a 150.000 maestros está siendo elogiada por su impacto positivo en más de cinco millones de niños egipcios, brindándoles las habilidades necesarias para enfrentar el siglo XXI.
Mansour insiste en que estos esfuerzos educativos y de construcción de escuelas ayudan a fortalecer los vínculos entre los dos países, promoviendo el intercambio de conocimientos en beneficio de las generaciones futuras. Enfatiza que la relación entre Estados Unidos y Egipto se basa en objetivos compartidos de desarrollo económico, preservación cultural, educación y seguridad.
Además, se hace hincapié en la protección del rico patrimonio cultural de Egipto, con una nueva iniciativa para fortalecer la trazabilidad de artefactos antiguos a través de los museos de El Cairo, en cooperación con Estados Unidos. Desde la firma de un acuerdo bilateral en 2016, más de 5.000 artefactos de contrabando han sido devueltos a Egipto, lo que demuestra el compromiso de Estados Unidos de proteger los tesoros nacionales de Egipto.
A través de importantes inversiones en la preservación del patrimonio cultural egipcio, en particular con una dotación de 150 millones de dólares en los últimos 30 años, Estados Unidos mantiene una sólida amistad con Egipto, ilustrada por su constante apoyo, en particular, a lugares emblemáticos como el mausoleo del Sultán. Qaytbay.
Esta estrecha colaboración entre los dos países resulta beneficiosa tanto para la preservación del patrimonio histórico de Egipto como para el desarrollo del sistema educativo del país, perfilando un futuro prometedor para los niños egipcios y la consolidación de las relaciones internacionales para el bien de las generaciones futuras.